El debate sobre la relación de Argentina con la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha cobrado relevancia tras la orden del Presidente Javier Milei de desvincularse del organismo. Ante este panorama, este medio se puso en contacto con Luis Cámera, médico y ex asesor del gobierno de Alberto Fernández, quien analizó las implicaciones de esta decisión y el balance de la gestión de la pandemia.
Luis Cámera considera que abandonar la OMS no es una decisión acertada. Aunque reconoce errores en su gestión, destacó su rol en el desarrollo intelectual, la formación de profesionales y la coordinación de investigaciones sanitarias. "Para los países con dificultades sociosanitarias, la OMS es clave", señaló.
La influencia de la OMS en las decisiones sanitarias de cada país
Además, refuta la idea de que Argentina haya perdido soberanía en sus decisiones de salud. "La OMS sugiere, aconseja, promueve, pero cada país es soberano en su política sanitaria", explicó Cámera. Incluso en circunstancias extremas como la pandemia, "las decisiones las tomó el gobierno argentino, no la OMS".
Frente a las críticas sobre el manejo de la pandemia, el entrevistado sostuvo que Argentina estuvo entre los países con mejores resultados en términos de mortalidad. "Sacando a China, Australia, Nueva Zelanda y otros países con cuarentenas extremas, Argentina estuvo entre los siete mejores del mundo", afirmó.
Argentina cuenta con la mejor expectativa de vida tras el fin de la pandemia
La expectativa de vida en Argentina se redujo solo entre siete y ocho meses, mientras que en países como Estados Unidos cayó dos años. "El impacto de la pandemia en Argentina fue significativamente menor al de otras naciones de la región, como Bolivia, Perú y México, donde se perdieron hasta cinco años de expectativa de vida", enfatizó Cámera.
Sobre las declaraciones del ex ministro de Economía, Martín Guzmán, quien sugirió que la cuarentena se extendió por razones políticas, el ex asesor del gobierno de Alberto Fernández lo desestimó. "Las cuarentenas en Argentina no fueron homogéneas, en el AMBA fueron más estrictas, pero en muchas provincias fueron más leves", aclara.
Para Cámera, las decisiones fueron sanitarias y no políticas: "La segunda ola fue la más letal y había que contener la propagación del virus hasta alcanzar una vacunación masiva".
A su vez, si bien Cámera defiende el rol de la OMS, reconoce fallas en su respuesta a la pandemia, especialmente en la comunicación sobre la transmisión del virus. "Tardaron demasiado en admitir que el virus se transmite por el aire", critica.