Obras sociales

Qué sucederá con las empresas y la libre elección de las prepagas

El nuevo esquema abre la puerta a una mayor competencia, pero también plantea desafíos en términos de costos y cobertura para las empresas.

Prepagas (Noticias Argentinas)

La implementación de la libre elección de prepagas tendrá un impacto directo en las empresas, que se verán obligadas a reconsiderar sus acuerdos y beneficios para los empleados.

Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con la investigadora Maira Bianchi quien contó que originalmente, los trabajadores en Argentina estaban afiliados a la Obra Social correspondiente a su sector laboral, lo que generaba una forma de redistribución interna de recursos. 

El sistema de salud de acuerdo a los ingresos

Según la entrevistada, esto se traducía en que las personas con salarios más altos, que realizaban mayores aportes, financiaban indirectamente a las familias de ingresos más bajos. Sin embargo, “la horizontalidad del sistema generaba diferencias, ya que, como es lógico, existían variaciones salariales dentro de cada sector, lo que generaba disparidades en la cobertura y los beneficios recibidos”, continuó.

A partir de la década de 1990, se introdujo un cambio importante en el sistema de salud, permitiendo la libertad de elección para los trabajadores y “los empleados podían optar entre diferentes obras sociales y prepagas, lo que daba lugar a una mayor competencia en el mercado”. Y agregó: “Además, se implementó el mecanismo de derivación de aportes de las obras sociales a las prepagas, creando el Fondo Solidario de Redistribución que tenía como objetivo subsidiar a los trabajadores de menores ingresos, ayudándolos a acceder a un sistema de salud más equitativo”.

La competencia entre las obras sociales y prepagas

En cuanto a este nuevo esquema, la entrevistada mencionó que permitió que las obras sociales pudieran competir directamente con las prepagas sin intermediarios, lo que tenía la intención de mejorar las deficiencias del sistema, especialmente en lo que respecta a la burocracia en la derivación de aportes. “La idea era agilizar el proceso y brindar una mejor calidad de atención”, añadió.

Por otra parte, “uno de los problemas clave de esta reforma es que favoreció principalmente a las familias con mayores aportes, ya que los hogares de menores ingresos no lograban cubrir el costo del Programa Médico Obligatorio”, el cual es el paquete básico de prestaciones que tanto las obras sociales como las prepagas deben ofrecer. Y agregó: “El sistema, tal como fue implementado, generó un incentivo para que las obras sociales y prepagas intentaran evitar la afiliación de los sectores de menores ingresos”. 

En continuidad con el tema, Bianchi aseguró que, de esta forma, “trataban de inducir a estas personas a que recurran a hospitales públicos en lugar de ofrecerles cobertura”.

Para finalizar, la entrevistada dijo: “esta situación se debía a que solo un pequeño porcentaje, alrededor del 30% de los hogares de mayores ingresos, podía costearlo adecuadamente; por lo tanto, el modelo, en lugar de garantizar la equidad, terminó reforzando las desigualdades en el acceso a la atención médica”.