Para Ignacio Kovarsky, presidente de CARBAP, si siguen las retenciones "hay muchos productores que se van a fundir"

Las retenciones siguen siendo una de las principales preocupaciones del sector rural, sobre todo por el impacto que tiene sobre la rentabilidad y es por eso que se exige al Gobierno que busque una alternativa para reducir la presión impositiva del agro. En función de analizar este tema en profundidad, este medio se puso en comunicación con el presidente de CARBAP, Ignacio Kovarsky.

Uno de los temas más preocupantes es la demora en la devolución del IVA a los productores rurales. Ignacio Kovarsky explicó que, al comercializar granos, los exportadores retienen el 80% del IVA, el cual debería ser reembolsado en un plazo de 30 a 60 días dependiendo de la categoría fiscal. Sin embargo, desde septiembre, estos reembolsos no se han realizado, generando tensión financiera entre los productores. "Esto pesa enormemente en un sector que ya enfrenta numerosos problemas económicos y fiscales", declaró.

Desde la secretaría de Agricultura todavía no hay respuestas claras hacia el sector rural

En comunicación con el secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, Kovarsky recibió una promesa de respuestas. No obstante, enfatizó que la explicación no es suficiente: "Lo que necesitamos es la ejecución inmediata del pago de estos montos".

El tema de las retenciones sigue siendo un punto de fricción entre el sector y el Gobierno. El entrevistado comparó la situación actual con las políticas del kirchnerismo, cuando "el campo era tratado como enemigo". Aunque reconoció algunas diferencias, criticó la falta de transparencia en la aplicación de impuestos: "Si en las liquidaciones de granos figurara lo que se lleva el Estado en retenciones, se entendería mejor la presión fiscal que soporta el sector".

Cuál es la alternativa ante una no eliminación de las retenciones

El presidente de CARBAP destacó que las retenciones son un "impuesto malo" y que de continuar, "hay muchos productores que se van a fundir". En caso de que no sea posible eliminar los derechos de exportación, propuso discutir una reducción gradual bajo un esquema de negociación que incluya metas claras y cronogramas definidos. "Es necesario que el Gobierno explique cómo recauda y gasta estos fondos, y que nosotros podamos plantear las necesidades del sector", subrayó.

El 6 de febrero la Mesa de Enlace se reunirá con las autoridades gubernamentales para abordar estos temas. Kovarsky espera que este encuentro sea el inicio de un diálogo constructivo. "Si nos dicen que no pueden eliminar las retenciones debido al déficit fiscal, al menos deben abrir una mesa de negociación para buscar soluciones intermedias", afirmó.

Además, destacó la necesidad de que las decisiones sobre las retenciones no queden en manos del Poder Ejecutivo de manera discrecional. "Es fundamental que estas cuestiones se debatan en el Congreso, donde puedan ser analizadas con mayor transparencia y participación", indicó.