Caída de ventas

Fernando Savore: "Enero y febrero siempre son meses de baja en las ventas, pero este año la caída fue aún más profunda"

El presidente de la Federación de Almaceneros detalló que en enero, las ventas disminuyeron un 10%, mientras que en febrero la retracción alcanzó el 13%.

Fernando Savore: "Enero y febrero siempre son meses de baja en las ventas, pero este año la caída fue aún más profunda" (Cedoc)

Desde el sector comercial apuntan que el consumo masivo todavía no encontró la suba que tanto se hablaba cuando la inflación se encontraba en descenso, enero y febrero, que suelen ser meses de baja, tuvieron una caída más profunda en comparación a años anteriores. Es por eso que para analizar este tema en profundidad, este medio se puso en comunicación con el presidente de la Federación de Almaceneros de la Provincia de Buenos Aires, Fernando Savore.

El consumo masivo sigue en declive con caídas pronunciadas durante los primeros meses de 2025. Según Fernando Savore, "enero y febrero siempre son meses de baja en las ventas, pero este año la caída fue aún más profunda". En enero, las ventas disminuyeron un 10%, mientras que en febrero la retracción alcanzó entre el 12 y el 13%. La expectativa de recuperación en marzo no se cumplió debido a las deudas acumuladas tras las vacaciones y los gastos escolares.

Uno de los mayores problemas para los pequeños comerciantes no es solo la caída del consumo, sino el aumento de los costos operativos. "El gasto en energía eléctrica subió un 400%", destacó Savore. A esto se suman los aumentos en el transporte, educación y otros servicios esenciales, lo que impacta directamente en la capacidad de compra de los consumidores. "Una familia tipo necesita al menos un millón y medio de pesos para cubrir sus necesidades básicas", afirmó.

El auge de las marcas pymes como alternativa de consumo

Ante el encarecimiento de los productos de grandes marcas, los consumidores comenzaron a optar por alternativas más económicas. "El pan lactal de primera marca cuesta alrededor de $5.000, mientras que una versión de producción pyme de igual calidad se vende a $2.200", explicó el entrevistado. Este fenómeno se extiende a otros rubros, como galletitas, fideos, papel higiénico y productos de limpieza. "Las marcas pymes han crecido de forma impresionante en nuestras góndolas", agregó.

El sector comercial experimentó una transformación en la forma de pago. "Hoy, de cada 10 clientes, 8 pagan con formato virtual", señaló Savore. Esto llevó a los bancos a competir por captar estos fondos digitales, ofreciendo beneficios financieros a los comerciantes. Sin embargo, el acceso al crédito sigue siendo limitado. "Históricamente, si no llevamos el dinero al mayorista, no hay mercadería", afirmó. Aunque algunos proveedores comenzaron a ofrecer compras en cuotas, esto se percibe más como una estrategia para liquidar stock que como un apoyo real al comercio.

Cambios en el stock de mercadería frente a la desaceleración de la inflación

A diferencia de años anteriores, cuando los comerciantes acumulaban stock para protegerse de la inflación, hoy la dinámica cambió. "Ya no conviene estoquear mercadería porque los precios se mantienen más estables", explicó el presidente de la Federación de Almaceneros. La compra ahora se realiza día a día, aprovechando promociones y evitando comprometer capital en productos que podrían no aumentar de precio.

Aunque la inflación desaceleró, algunas empresas comenzaron a ajustar precios nuevamente. "Productos como caramelos, cervezas y lácteos han registrado subas de entre 2,5 y 6%", advirtió Savore. En particular, el sector de higiene personal y limpieza sigue con precios elevados. "No tiene sentido que una pasta dental siga costando casi $5.000 cuando el dólar ha bajado", criticó.