Poder adquisitivo

En qué conviene invertir: inmuebles, Bolsa o un negocio propio

A pesar de la desaceleración de la inflación, Argentina enfrenta una delicada crisis económica que impulsa a sus habitantes a buscar alternativas de inversión para mantener y aumentar su poder adquisitivo.

Las mejores opciones para invertir (Télam)

Ante ciertas desventajas económicas, cada vez son más las personas que buscan generar un dinero a través de la inversión. Sin embargo, existen varias posibilidades como los inmuebles, la Bolsa o el negocio propio, que también se ajustarían a cada caso, considerando que cada situación es única y particular.

Cuál es el rol de los asesores globales

Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con el asesor financiero Matías Dahgero quien explicó, en primer lugar, que los asesores globales de inversiones se dedican a “la administración discrecional de carteras” en donde son buscados por los clientes para “administrar las inversiones”.

Ventajas y desventajas de las inversiones

Según el entrevistado, a la hora de invertir, “es recomendable un poco en inmuebles, otro poco en la Bolsa y  en el propio negocio, comprendiendo las características y beneficios de cada rubro”. Y siguió: “Es crucial entender el tiempo adecuado para cada instrumento y en qué momento de la vida se encuentra uno”.

En continuidad con el tema, Dahgero sostuvo que cuando menciona el caso de los inmuebles se refiere a comprar propiedades para obtener renta y no a comprar inmuebles en construcción o para reventa, “ya que el riesgo de esas inversiones se asemeja al de un negocio propio, como alquilar en Airbnb”. Y agregó: “El sector inmobiliario no está en su mejor momento y cuando las Letras del Tesoro ofrecen rendimientos del 5% , invertir en inmuebles no es tan atractivo”.

La Bolsa, los inmuebles y el negocio propio

Por el lado de la Bolsa, el asesor aseguró que, “puede ofrecer mayores rendimientos que los inmuebles a largo plazo, aunque con mayor riesgo” y por su parte, el negocio propio “puede generar ingresos significativamente mayores si prospera, pero también conlleva más riesgo”. “A diferencia de la Bolsa o los inmuebles, donde es difícil perder todo el capital, un negocio propio puede resultar en pérdidas significativas, especialmente si se han adquirido deudas para financiarlo”, dijo.

Con respecto a las personas a punto de jubilarse, Dahgero explicó que, “invertir en un negocio propio puede no ser aconsejable”. Y siguió: “Es crucial encontrar un equilibrio y establecer un sueldo de mercado”. 
Para cerrar, agregó: “Diversificar es esencial, ya que depender exclusivamente de un negocio propio puede poner en riesgo tanto los ingresos habituales como el patrimonio en caso de dificultades”.