El pago más grande: Argentina afronta un desembolso de 4.400 millones de dólares
El gobierno argentino enfrenta un desafío económico al cumplir con el pago más grande, lo que afecta las reservas pero también abre nuevas perspectivas de ingresos a través de exportaciones y la industria de hidrocarburos.
El gobierno argentino acaba de realizar un desembolso histórico de casi 4.400 millones de dólares. Si bien este pago ha reducido las reservas, las perspectivas económicas se ven impulsadas por la continua liquidación de la cosecha y el crecimiento de las exportaciones.
Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con el asesor financiero, Gastón Lentini, quien confirmó que efectivamente se realizó un desembolso cercano a los 4.400 millones de dólares, “una cifra que parecía casi imposible de alcanzar, especialmente si consideramos el contexto cuando Massa aún era ministro de Economía”.
Cómo se financió el pago y qué sucedió con las reservas
Según el entrevistado, la contrapartida inmediata fue la disminución de las reservas, ya que este pago “se financió, en parte, con esos fondos y de este monto, una porción se destinó a inversores argentinos que poseen bonos bajo ley argentina, lo que permite que esos dólares permanezcan dentro del sistema local”. Y agregó: “Otra parte significativa, aproximadamente la mitad, se depositó en cuentas en el exterior, conocidas como "dólares cable"”.
En continuidad con el tema, el entrevistado mencionó que estos fondos pueden estar a nombre de inversores tanto nacionales como internacionales, pero al estar respaldados por bonos emitidos bajo leyes extranjeras, los dólares quedan resguardados fuera del sistema legal argentino. Y siguió: “Ahora, la gran incógnita es qué sucederá con los activos de Argentina”.
Qué podrían generar los bonos y las obligaciones negociables
En ese contexto, Lentini explicó que ya que hay una cantidad significativa de bonos y obligaciones negociables en circulación, alrededor de 2.000 millones de dólares, que podrían generar un impulso en los activos del país, especialmente si los inversores comienzan a demandar su compra. “Este movimiento de liquidez podría fortalecer aún más el mercado”, continuó.
Por otra parte, el asesor financiero mencionó que la idea de no necesitar financiación externa ha estado en discusión desde hace algún tiempo, y parece cada vez más posible por dos razones clave. “La primera es la continuidad de la liquidación de divisas por parte del sector agropecuario, que podría intensificarse entre marzo y mayo con la cosecha gruesa y la segunda es la exportación de hidrocarburos, como gas y petróleo”, mencionó.
Para finalizar Lentini mencionó que este panorama “asegura una entrada constante de dólares, lo que reduce la dependencia del ciclo agrícola y fortalece las perspectivas económicas del país, a tal punto que tanto el ministro de Economía como el presidente se muestran confiados en que Argentina no necesita financiación externa gracias a estos ingresos”.
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