"Lo que más me gustaba contar era una situación de la gente de pueblo, lugares donde todos se conocen y saben de la vida de los otros, en el buen y en el mal sentido. Soy de un pueblo muy chico y trasladé a la obra toda esa vivencia que traigo. Al contar anécdotas me dí cuenta de que era gracioso para la gente ver que vivimos de esa manera. Hay algo de La Mami que nació desde ahí: contar de dónde vengo, cómo son esas relaciones. Después, con la escritura, empezó a aparecer un secreto que tenía guardado la mami y apareció el conflicto. Mi mensaje para esta propuesta es hablar de lo que uno se guarda o que se lleva con la muerte, incluso a veces está esclavizado por ese secreto", revela Paolo Sambrini al presentar vía Zoom la comedia que escribió y dirige y que se representa los lunes en La Carpintería (Jean Jaurés 858, CABA).
El punto de partida es justamente el secreto de la madre de tres hermanos grandes, ya fallecida, y que les anima la fiesta de fin de año. Con un elenco integrado por Graciela Tenenbaum, Abian Vainstein y Jorgelina Vera, es una historia intensa y emocionante que explora los silencios y secretos de una familia. Aquí la charla completa con Paolo, para terminar de hacerse una idea de lo que van a ir a ver (porque seguramente la van a ir a ver):
La Mami es una obra de teatro para reírse a carcajadas y emocionarse hasta las lágrimas. Pero esta comedia dramática además tiene un equipo detrás que incluye la escenografía de Claudio Provenzano y Juan Manuel Sequeira, el vestuario de Lidia Benitez, la iluminación de Leticia Agesta y el sonido de Emilio Mundel y Ezequiel “Chicho” Scillone. "Me gusta que en el teatro se den a la misma vez las dos caritas famosas -aclara Sambrini-, que se ríen y que lloran. Me parece que eso es lo lindo de la experiencia teatral. A simple vista se podría decir que es una comedia desde el humor, pero también tiene sus tintes. Mucha gente sale de la sala diciendo: 'Qué podría compartir hoy para ver si vivo un toque más liviano?'".
"Me gusta que el espectador esté todo el tiempo pendiente de cosas que pasan en el escenario, que no se achanche mucho. Porque ya tenía toda la mecánica de la obra en mi cabeza. Fue un trabajo complejo, pero pero a mí me encanta; la verdad es hermoso. Lo que agradece el público es la cantidad de texto y de movimiento que tiene la puesta. Está todo marcado aunque no es un trabajo coreográfico de los actores. Pero lo que están haciendo los chicos ahí adentro es una maravilla, hermoso", culmina el autor y director de La Mami entusiasmado. Sin dudas, es para empezar la semana bien arriba. Encontrá acá más info sobre las entradas.