Para quienes nacimos en el último cuarto de siglo, los videojuegos son una parte más de nuestras vidas. Si bien esto puede llevar a pensar que son una creación reciente, lo cierto es que tienen una rica historia que se remonta al menos a 60 años atrás.
El 14 de diciembre de 1948, Thomas Goldsmith Jr y Estle Ray Mann recibieron la patente de lo que puede considerarse el primer "videojuego". Se trataba de un simulador de lanzamiento de un misil, que funcionaba con circuitos analógicos y tubos al vacío. El juego permitía controlar la trayectoria y velocidad del misil en una pantalla de tubo de rayos catódicos.
Si bien era el primer dispositivo de este tipo creado específicamente para funcionar como un juego, la escasa tecnología de la posguerra no permitía llamarlo "videojuego", porque no generaba señales de video.
Lo mismo ocurrió en el Festival Británico de 1951, cuando se presentó NIMROD, una computadora especialmente dedicada al juego conocido como Nim. Al año siguiente, Alexander S. Douglas creó OXO, un Ta-Te-Tí que se jugaba contra la computadora. El código del juego tenía sólo 9 líneas y formaba parte de su tesis para la Universidad de Cambridge.
Algunos consideran que el verdadero "primer videojuego" es el Tennis For Two, creado por el físico nuclear William Higinbotham para la muestra de 1958 del Laboratorio Nacional de Brookhavenm en Long Island, Nueva York.
Todos los años, el laboratorio abría sus puertas a los visitantes, que por lo general se aburría mucho con la exposición. Por eso, a Higinbotham se le ocurrió inventar algo para entretener al público: terminó creando una rústica versión de tenis en una pantalla de 13 centímetros de ancho, donde sólo se veían la pelota y la red, representadas por un osciloscopio. Los jugadores eran invisibles y el control, una caja metálica con una perilla y un botón.
El científico cumplió su objetivo: el 18 de octubre de 1958, decenas de personas hicieron cola para jugar Tennis For Two. Sin embargo, el juego nunca salió del laboratorio y cayó en el olvido hasta fines de siglo, cuando se lo reconstruyo. Puede ver cómo funcionaba en éste video, e incluso puede descargar una versión aquí.
En 1961, un grupo de estudiantes del MIT liderados por Steve Russell creo Spacewar! ("Guerra Espacial!", en inglés), en el que dos naves espaciales debían dispararse entre sí hasta destruirse. Este juego, como todos los anteriores sólo funcionaba en las máquinas especialmente dedicadas para ellos, y no podían funcionar en un televisor común, porque no emitían señales de video. Por eso no se los puede considerar "videojuegos".
Ese problema venía desvelando a Ralph Baer, un inventor estadounidense nacido en Alemania, desde hacía tiempo. En 1966 se dispuso a crear un sistema de videojuegos que pudiera funcionar en cualquier TV. El resultado, un año después, fue la Odissey, la primera consola hogareña.
Baer vendió la licencia de su consola a Magnavox, y en mayo de 1972 se lanzó al mercado. Según cuenta el científico, se vendieron cien mil copias de juegos para la consola. Había nacido la industria de videojuegos para el hogar, que hoy factura unos 11.000 millones de dólares anuales, sólo en Estados Unidos.
Seis meses antes, Nolan Bushnell había creado la primera máquina de Arcade o "fichines". Cuando se lanzó la Odissey en Los Ángeles, conoció un juego de ping pong que lo "inspiraría" para lanzar Pong, el famoso juego que es considerado -erroneamente- como el primero.
La "paternidad" de los videojuegos llevaría a numerosas disputas legales años más tarde. Pero sus creadores ya habían echado a andar la bola de una industria que hoy entretiene a millones de jóvenes (y no tanto) en todo el mundo.
(*) Redactor de Perfil.com
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