El congresista republicano Tim Burchett afirmó que debajo del mar se mueve “una nave extraterrestre del tamaño de un estadio de fútbol que viaja a velocidades increibles”. La información se la habría suministrado un almirante al que no identificó.
Para Burchett, no hay de qué preocuparse porque, de acuerdo a lo que expresó en un reportaje con el excongresista republicano Matt Gaetz, estos extraterrestres “no son capaces de hacer daño y ya nos podrían haber asado hace tiempo”.
El miembro de la Cámara de Representantes norteamericana desde 2019 ya había realizado declaraciones de esta índole, cuando afirmó que el gobierno de su país ocultaba la existencia de ovnis y otras actividades extraterrestres, que eran posible por “la inmensidad del gran universo de Dios”.
En esa línea se ubicaron las afirmaciones del ex oficial de inteligencia David Grush en 2023, quien expresó en el congreso que la administración norteamericana tenía un depósito secreto de naves espaciales alienígenas derribadas y cadáveres no humanos.
Para contrarrestar esas versiones, en marzo del año pasado, la Oficina de Resolución de Anomalías en Todos los Dominios del Departamento de Defensa (AARO, por sus siglas en inglés) publicó un informe en el que afirmó que no tenía pruebas de la existencia de ovnis, y que muchos avistamientos sospechosos habían resultado ser simples globos meteorológicos, aviones espía, satélites y otros objetos normales.