Más allá de la presencia de diferentes equipos de polo y pato a nivel internacional, la Argentina también tiene presencia en una disciplina deportiva que, no solo utiliza caballos, sino que también cuenta con su torneo mundial.
Se trata del Horseball, un deporte en el que compiten dos equipos de cuatro jugadores y que, según cuentan quienes lo practican, “combina elementos del rugby, el básquet y el fútbol”, más allá de usar una pelota con asas, como en el pato.
En este caso, y en el marco de la Expo Nuestros Caballos, que se desarrolla en el predio de La Rural hasta mañana, Argentina es la sede del quinto Mundial de la especialidad, que por primera vez se juega fuera de Europa. Participan 15 países con representantes en dos categorías: Pro-Elite (mixto) y Ladies (mujeres).
“Podemos decir que es como el ‘Rugby a Caballo’, el Horseball es comparado con este deporte por la forma de hacer pases de la pelota entre los jugadores para conseguir marcar puntos”, destacó Pablo Segovia, presidente de la Asociación Argentina de Horseball
Team argentino. La familia Taberna es una de las pioneras en practicar este juego en el país y sus integrantes conforman una verdadera selección.
Al frente del equipo se encuentra Nicolás Taberna, capitán de la categoría Pro Elite.
Nació en General Las Heras, y fue campeón del Abierto de Horseball en 2024. Con su hermano, Facundo, participó de los cinco mundiales de Horseball que se jugaron.
Facundo tiene 42 años y afirma que “nació con el caballo”. Mientras prepara la montura de su caballo, cuenta que “si bien es un deporte costoso, es mucho menos que cualquier otro deporte hípico. Para jugar al polo necesitas seis o siete caballos, al pato lo mismo, en Horseball sólo se necesita uno”, afirmó.
El representativo nacional cuenta con dos miembros de la familia de la segunda generación: Tomás e Inés Healy.
Tomás tiene 24 años, participa en la categoría Pro Elite y fue el mejor jugador de la final en el abierto de pato en 2021.