Este martes 27 de agosto la joven que denunció ser abusada por los rugbiers franceses Oscar Jégou y Hugo Araudou en Mendoza debía presentarse a una audiencia a la que no asistió. Para explicar su decisión presentó una carta en la que hizo alusión a “un apriete psicológico”. “Me mataron en vida”, sentenció.
“Por creer en la Justicia, me animé a denunciar, pero hoy sufro un apriete psicológico que jamás imaginé, me sacaron las ganas de vivir”, apunta el texto de la presunta víctima quien también arremetió contra el gobernador de la provincia, Alfredo Cornejo, y contra el abogado defensor de los rugbiers, Rafael Cúneo Libarona. “Pueden dormir tranquilos mirando a la cara a sus esposas, hijas y nietas”, subrayó.
“Me arruinaron la vida, manejando a la prensa despiadadamente con una condena social en mi contra. Gracias Ministerio Público Fiscal. Gracias, me mataron en vida”, concluye.
La joven no se presentó para que le realizaran pericias psicológicas por problemas de salud. De esta forma, la audiencia fue suspendida y reprogramada para el viernes.
El fiscal Gonzalo Nazar está a cargo de la investigación de la causa. La denuncia señala que durante la madrugada del pasado 7 de julio, luego del partido que disputó la Selección francesa de rugby ante Argentina en la ciudad de Mendoza la presunta víctima y uno de los jugadores, Araudou, se conocieron en un bar. Desde allí se retiraron juntos al Diplomatic Hotel donde el deportista compartía habitación con Jégou. La mujer detalló que ambos la habrían golpeado, mordido, ahorcado y abusado unas seis veces.
Los rugbiers solicitaron ser sobreseídos
Los rugbiers franceses solicitaron a la justicia su sobreseimiento y llegaron este martes a Buenos Aires desde la provincia de Mendoza mientras se examina su caso. Los jugadores tienen prohibido salir de Argentina. Más temprano, su defensa solicitó a la justicia que fueran sobreseídos, es decir que se cerrara el caso antes de llegar a juicio, con base en las pruebas recabadas.
"Se ha hecho el pedido de sobreseimiento, ahora la decisión la tiene la justicia. Vamos a esperar", dijo a la prensa Germán Hnatow, abogado de la defensa, al retirarse del Polo Judicial de Mendoza, 1.000 km al oeste de Buenos Aires y también se refirió a la audiencia suspendida. "Por segunda vez no se ha presentado, así que estamos esperando lo que decida la justicia y por supuesto haciendo nuestros pedidos para que esto ya concluya de una buena vez", dijo el letrado.
Los acusados fueron detenidos en Buenos Aires el 8 de julio y conducidos a Mendoza donde, tras pasar una semana en un centro de detención, fueron beneficiados con la prisión domiciliaria y liberados el 12 de agosto por orden judicial.
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