Efectivos de Gendarmería reprimieron esta tarde a manifestantes y trabajadores de la autopartista Lear, en la autopista Panamericana a la altura de General Pacheco, y en menos de cinco minutos despejaron la autopista, que se hallaba totalmente cortada por los activistas, no sin antes repartir balas de goma y gases lacrimógenos.
Tras los incidentes, los manifestantes se agolparon en la colectora y se mantenían allí entonando cánticos.
Además de algunos manifestantes que fueron alcanzados por las balas de goma, un efectivo de Gendarmería resultó herido, aparentemente alcanzado por un piedrazo que habría partido de los manifestantes, y debió ser atendido por sus compañeros al quedar tendido sobre el pavimento.
El conflicto entre los trabajadores de la autopartista Lear, la empresa y las Fuerzas de Seguridad se remontan meses atrás, con sucesivos cortes al tránisto tras lo cual siempre sobrevenía el desalojo violento de la Gendarmería Nacional.
Entre las distintas formas de desalojo aplicadas por la fuerza de seguridad creada para la custodia de las fronteras del país, se llegó a probar al comandante Juan Alberto López Torales como agente volador que simuló ser atropellado para detener a un manifestante el 31 de julio.
