A siete meses de la desaparición de Loan Danilo Peña en 9 de Julio, Corrientes, el Papa Francisco recordó el caso durante su audiencia este miércoles y dijo que “una de las hipótesis” es que el niño de 5 años haya sido víctima del tráfico de órganos.
El pontífice dedicó la catequesis de su audiencia general a “los cientos de millones de menores se ven obligados a trabajar” y lamentó la indiferencia ante las “vidas perdidas” de los niños que son “esclavos de la trata para la prostitución o de la pornografía, y de los matrimonios forzados”. A continuación, Francisco dejó de un lado su discurso preparado para su presentación semanal sobre “Los amados del Padre” y mencionó al niño correntino.
“Hay un caso en mi país, un chico llamado Loan fue secuestrado y nadie sabe dónde está, y una de las hipótesis es que se lo hayan llevado para extraerle los órganos, para hacer trasplantes. Y esto se hace, se sabe bien. Algunos vuelven con la cicatriz, otros mueren. Por eso hoy quiero recordar a este chico Loan”, sostuvo el Santo Padre en el Aula Pablo VI.
La manifestación del Papa Francisco llega después de que los padres de Loan, María Noguera y José Peña, le enviaran una carta al Papa en la que le pidieron que incluyera a su hijo en sus rezos.
“Somos María Noguera y José Peña, madre y padre de Loan Danilo Peña. Somos María y José y nos toca en carne propia vivir el calvario que sufrieron los padres de Jesús. Ojalá estás palabras le lleguen y también que en algún momento nos pueda recibir", escribieron en el texto enviado al Vaticano el pasado 12 de noviembre.
Además, las declaraciones del Sumo Pontífice refuerzan el pedido que hizo la Iglesia Católica argentina, a través de la Comisión Episcopal de la Pastoral de Migrantes e Itinerantes (CEMI), cuando el pasado 23 de junio reclamó en un comunicado su consternación ante la repetición de casos semejantes “sin que se activen las alertas y procedimientos a tiempo, entorpeciendo el esclarecimiento de los mismos”.
De manera similar al pontífice, el organismo advirtió en el escrito que, a partir de “varias conjeturas” que se hicieron durante el inicio de la búsqueda, “la eventual posibilidad de que (Loan) pueda ser una víctima más de la denominada trata de personas va cobrando fuerza”.
El paradero de Loan es desconocido desde el 13 de junio de 2024, cuando desapareció en el paraje Algarrobal, en una propiedad cercana a la casa de su abuela, mientras recogía naranjas junto a un grupo de familiares.
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Luego de recordar la desaparición del niño argentino, el Papa llamó a “escuchar el sufrimiento de los que no tienen voz, de los que no tienen educación”, a “luchar contra la explotación, especialmente la infantil” y a “no ser cómplices”.
“¿Y cuándo lo somos? Por ejemplo, cuando compramos productos que emplean mano de obra infantil. ¿Cómo puedo comer y vestirme sabiendo que detrás de esa comida o de esa ropa hay niños explotados, que trabajan en vez de ir a la escuela?“, cuestionó.
En este sentido, además de afirmar que cada individuo “puede ser una gota que puede convertirse en un mar”, le recordó a las instituciones, “incluidas las eclesiásticas”, y a las empresas que “pueden marcar la diferencia dirigiendo sus inversiones a empresas que no utilicen ni permitan el trabajo infantil”.
Esta no es la primera vez que el pontífice se expresa sobre la práctica de la trata de personas. En febrero de 2024, en el marco de la X Jornada Mundial de Oración y Reflexión contra la Trata de Personas, escribió: “Si cerramos nuestros ojos y oídos, si permanecemos inertes, seremos cómplices”.
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