Elba Marcovecchio llegó al Hospital Italiano este miércoles por la mañana con una expresión de preocupación y agotamiento. Su esposo, el periodista Jorge Lanata, se somete a su cuarta operación en un intento por solucionar la isquemia intestinal que lo tiene afectado.
En declaraciones a Socios del Espectáculo, Marcovecchio comentó: "Jorge pasó la noche estable. Está en las mejores manos de Latinoamérica. Los médicos tienen esperanzas y yo también". La abogada también aclaró que, aunque están en cadenas de oración, ni ella ni nadie de la familia llamó a un cura para darle la extremaunción a Lanata: "Estamos en oración. Si vino un cura, no lo vi. El capellán del hospital está siempre".
Visiblemente preocupada, Marcovecchio confesó que siente miedo, "como tendría cualquiera". Su esposo lleva más de 120 días internado.
Jorge Lanata: la lucha médica continúa
Lanata atraviesa la cuarta cirugía en dos semanas, debido a complicaciones que impidieron finalizar la intervención inicial tras la detección de la isquemia. Luego de extirpar las partes del intestino afectadas por necrosis, los médicos deben ahora intentar cerrarlo nuevamente.
Ayer martes, Lanata pasó por su tercera cirugía y permanece en estado crítico, sedado en terapia intensiva. Lleva cuatro meses de internación y su situación sigue siendo grave, según fuentes cercanas al periodista de 63 años.
En operaciones previas, los médicos le extirparon 60 centímetros de intestino y, en una intervención posterior, removieron otros 10 centímetros. Actualmente, Lanata tiene una ostomía externa, lo que implica una derivación del intestino para garantizar la evacuación.
Conflictos familiares en medio de la crisis de salud
Mientras Jorge Lanata lucha por su vida, su familia enfrenta disputas legales. Su esposa, Elba Marcovecchio, decidió mantener cerrado el departamento del periodista para "preservar la integridad del inmueble y despejar dudas sobre supuestos faltantes", según trascendió.
La medida cuenta con respaldo legal, ya que Lanata le otorgó a Marcovecchio poderes sobre sus bienes antes de su actual estado crítico, permitiéndole gestionar propiedades, finanzas y pagos de impuestos.
Sin embargo, sus hijas, Bárbara y Lola Lanata, habrían solicitado la revocación de esa autoridad. La jueza Lucila Inés Córdoba, quien lleva el caso, analiza la posibilidad de anular el poder otorgado a Marcovecchio.
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