Un estudio publicado en el European Heart Journal, revela que el consumo excesivo de alcohol aumenta las probabilidades de arritmias en jóvenes sanos.
El análisis monitoreó durante 48 horas el ritmo cardíaco de 200 jóvenes antes, durante y después de beber en exceso.
Los datos muestran que más del 5% de los participantes sufrieron arritmias importantes en la fase de recuperación, mientras que otros desarrollaron taquicardias de más de 100 latidos por minuto durante la fiesta.
El estudio también plantea la necesidad de investigar las repercusiones a largo plazo del consumo excesivo de alcohol sobre el corazón. Se observó que esta bebida actúa sobre el sistema nervioso, aumentando el estrés cardíaco y la frecuencia de los latidos.
También se confirmó el denominado síndrome del corazón de vacaciones, una condición en la que personas sanas desarrollan arritmias tras episodios de consumo intenso de alcohol, especialmente en contextos festivos.
Este síndrome es un recordatorio de que el corazón puede resentir los efectos de una noche de excesos, y es una advertencia para moderar la ingesta.
En Argentina mueren 8.000 personas al año por enfermedades vinculadas al consumo de alcohol. En jóvenes, la edad de inicio es a los 13 años y la tendencia es que cada vez sea a menor edad. En adolescentes de 13 a 15 años, el consumo en mujeres aumentó superando al de los varones.
