El sistema de salud argentino atraviesa uno de los escenarios más difíciles de su historia. Sin embargo, en los últimos meses se sumó una peligrosa tendencia en el ámbito privado. Entre los afiliados, hay mucha preocupación porque cada vez es más tedioso conseguir prestaciones de algunas especialidades en las obras sociales y prepagas.
En este sentido, la odontopediatra Luciana Moreu (@od.lucianamoreu) explicó: “Los odontólogos decidimos trabajar de manera particular para poder cumplir de manera correcta con los protocolos que hoy en día están vigentes y así poder saldar las cuentas que necesitamos para llegar a fin de mes”.
“Con respecto a que las obras sociales pagan a los 90-120 días, esas prestaciones requieren del trabajo de un laboratorio y, muchas veces, ese monto que nos pagan recién a los tres meses no alcanza para cubrir el costo de un laboratorio y realizar los trabajos en un consultorio”, explicó la odontóloga y docente.
Récord de 41 mil casos de Covid-19, cifra más alta desde que comenzó la pandemia
“En este momento lo que está sucediendo es que hay severos problemas con el tema de los pagos y piden una cantidad de papeles absurdos, como planes de tratamiento o justificación de sesiones”, expresó, en tanto, el musicoterapeuta Gabriel Federico. “No hay una coherencia entre lo que se solicita y lo que nosotros hacemos”, añadió.
Muchos profesionales, incluso, debieron cerrar las puertas de diferentes centros médicos y reconvertirse. “Entre los pocos niños que teníamos, más las dificultades en las cobranzas, se generó un combo explosivo que me llevó, después de tantos años, a tomar la terrible decisión de cerrar el centro”, expuso el musicoterapeuta.