El municipio misionero de San Vicente y dos empresas que producen biodiésel con aceite vegetal usado de desechos de cocinas y locales gastronómicos lanzaron el Clúster del Aceite Vegetal. Impulsan un mecanismo que potencie los circuitos de recolección del aceite vegetal usado en hogares, empresas y locales.
El lanzamiento fue apoyado por diputados provinciales en la Legislatura, donde se impulsa una ley para reciclar aceite.
Para su acopio, hay un incentivo gubernamental de 150 pesos por cada litro y, así, muchos chicos pueden pagarse sus viajes de estudio en los servicios que presta una de las compañías aliadas.
Al analizar los números sobre el costo de este biodiésel comparado con el diésel que se compra en las estaciones de servicio, los empresarios señalan que hay un ahorro del 50% porque se usan muchos menos aditivos químicos para desgomar el aceite para que sea apto para esta función.
