Hay tres misterios arqueológicos que la inteligencia artificial está por resolver.
En primer lugar, los textos antiguos. Los investigadores detectan distintos patrones en grandes cantidades de datos, ya que examinan y procesan imágenes mucho más rápido de lo que lo hacen los humanos. Esta podría ser la clave, para resolver uno de los misterios arqueológicos que mantienen en vilo a los investigadores.
Entre todas las áreas se encuentra el lenguaje de Línea A, descubierto en distintas tabletas en Creta, alrededor de 1900. Es considerado el primer guión utilizado por la civilización minoica, que fue un reino en la edad de bronce, liderado por el rey Minos.
Este lenguaje ha sido objeto de estudio e investigación, pero nunca se pudo descifrar. Por eso la guía entra a jugar un rol clave en lo que buscan traducir automáticamente distintos textos, sumado a técnicas para desentrañar patrones. Todas estas investigaciones generan expectativas y esperanzas para que la inteligencia artificial pueda desentrañar este misterio de Línea A.
Otro de los misterios en los que la inteligencia está jugando un papel importantísimo, es en descifrar los pergaminos de Herculano que fueron descubiertos en ruinas, cerca de Pompeya, del mismo modo los investigadores aceleraron 21 veces el proceso de descubrimiento de nuevas líneas de Nazca utilizando inteligencia artificial con IBM.
¿Para vos cual es el misterio más grande que la inteligencia artificial aún no pudo descifrar?
