En Hungría se aprobó una enmienda a la Constitución que permite al gobierno prohibir actos públicos de las comunidades LGBTQ+.
La norma que requería una votación de dos tercios, fue aprobada con 140 votos a favor y 21 en contra. Fue propuesta por la coalición gobernante Fidesz-KDNP liderada por el primer ministro populista Viktor Orbán.
La medida generó repudio en juristas y críticos que la calificaron como otro paso hacia el autoritarismo por parte del gobierno populista.
La controvertida legislación de “protección infantil” de Hungría prohíbe la “representación o promoción” de la homosexualidad a menores de 18 años. Esta medida se suma a la ley aprobada por vía rápida en el Parlamento en marzo que prohíbe los actos públicos celebrados por las comunidades LGBTQ+, incluido el popular acto del Orgullo en Budapest, que atrae a miles de personas cada año.