Rusia confirmó que Ucrania disparó seis misiles de largo alcance suministrados por Estados Unidos contra su territorio, por primera vez en 1.000 días de conflicto.
Kiev recibió la autorización de Washington de golpear suelo ruso con esos proyectiles tácticos ATACAMS que cayeron en la región de Briansk. El uso de este tipo de proyectiles era una línea roja para Moscú "que prometió una respuesta apropiada, si eso ocurría", dijo.
Desde Rio de Janeiro, donde participa de la Cumbre del G20, el canciller ruso, Serguéi Lavrov, prometió una respuesta "acorde" de Moscú tras el lanzamiento. Y aseguró que marca una "nueva fase de la guerra de Occidente".
El martes el presidente ruso, Vladimir Putin, firmó un decreto que amplía las posibilidades del país de utilizar armas nucleares.
La medida permite al Kremlin utilizarlas contra una nación sin armas atómicas, como Ucrania, pero que esté respaldada por una potencia nuclear como Estados Unidos.
Putin advirtió en septiembre pasado que si Occidente autorizaba a Kiev atacar territorio ruso con misiles de mayor alcance, significa que "los países de la OTAN están en guerra con Rusia".
A lo largo del conflicto, el presidente estadounidense, Joe Biden, se había mantenido firme en no entregarle a Ucrania misiles estadounidenses para atacar Rusia, al advertir que podría desencadenar una escalada del conflicto por parte de Putin. Sin embargo, tras la incorporación de las tropas extranjeras, el mandatario cedió ante el pedido de Volodimir Zelensky y entregó las armas.
Y sumó que la candidata demócrata Kamala Harris, perdió frente al republicano Donald Trump. La invasión rusa a Ucrania fue lanzada el 24 de febrero de 2022. Actualmente Moscú ocupa cerca del 20% del territorio ucraniano.
