Miles de personas fueron evacuadas la madrugada del lunes tras la erupción del volcán de Fuego en Guatemala, que lanzó columnas de lava, ceniza y rocas, y que es considerado el más activo en Centroamérica. Afortunadamente, luego disminuyó su actividad.
En ese contexto, la población se refugió a unos 10 km de distancia del lugar en erupción que está situado a unos 35 km al suroeste de la capital.
El coloso de 3.763 metros de altura está situado entre los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez.
Lo ocurrido el pasado 9 de marzo, hace que esté en la mira del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología de Guatemala (INSIVUMEH).
En ese entonces, la erupción se prolongó durante 8 horas y obligó a evacuar a miles de habitantes de zonas cercanas. Las autoridades informaron que "los parámetros de monitoreo volcánico han retornado a su nivel calificado como normal", aunque continuarán observando su actividad en los próximos días y semanas.