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Elecciones presidenciales

Elecciones 2024: Uruguay se prepara para la definición entre Yamandú Orsi y Álvaro Delgado

La segunda vuelta y definitiva será el 24 de noviembre.

Yamandú Orsi y Álvaro Delgado
Yamandú Orsi y Álvaro Delgado | Cedoc

Yamandú Orsi, del izquierdista Frente Amplio, y Álvaro Delgado, de la coalición gobernante de centroderecha, se medirán en un reñido balotaje para definir el próximo presidente de Uruguay. 

Con más del 90% de los circuitos escrutados, Orsi, delfín del expresidente José Mujica, logró el 43,9% de los votos, seguido de Delgado, con casi el 27%.

Orsi, un profesor de historia de 57 años, gobernó el departamento de Canelones durante dos períodos, aspira a que la izquierda, que administró Uruguay por tres periodos consecutivos, regrese al poder.

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El candidato opositor celebró el resultado y llamó a redoblar los esfuerzos para triunfar en la segunda vuelta. "Vamos en estos 27 días por ese último esfuerzo, con más ganas que nunca, más de pie que nunca compañeras y compañeros", dijo Orsi.

Deberá derrotar a Álvaro Delgado, un veterinario de 55 años, quien fue diputado y senador, antes de ocupar el cargo de secretario de la presidencia de Luis Lacalle Pou.

El candidato del gobernante Partido Nacional celebró rodeado de los socios de la coalición oficialista, que también incluye al Partido Colorado, que obtuvo 16% de los votos, Cabildo Abierto, con 2,4% y el Partido Independiente, de centroizquierda, con 1,7%. 

La segunda vuelta será el 24 de noviembre. El ganador sustituirá al presidente Luis Lacalle Pou, que tiene un índice de aprobación del 50% pero está impedido constitucionalmente de buscar un segundo mandato consecutivo.
 
Además de la contienda presidencial y la renovación del Parlamento bicameral, dos plebiscitos fueron sometidos a consideración de la ciudadanía: uno sobre el régimen previsional y otro sobre seguridad ciudadana. Ambos fracasaron, con sólo cerca de 39% de votos afirmativos.

El más polémico, impulsado por la central sindical única Pit-CNT con apoyo de sectores frenteamplistas, proponía reducir la edad mínima de jubilación de 65 a 60 años y prohibir los planes de pensiones privados. Ninguno de los candidatos principales lo respalda.