El papa Francisco realizó una visita no programada a la Basílica de San Pedro este jueves, en lo que marcó su segunda aparición pública en pocos días. Su estado de salud sigue siendo estable y muestra mejoras significativas en la respiración, movilidad y voz, como se evidenció en su comparecencia pública del domingo.
A su llegada, ingresó en silla de ruedas por la Puerta de la Oración, una entrada lateral próxima a la Casa Santa Marta, donde reside. Francisco fue visto saludando a varios trabajadores que estaban realizando tareas de restauración en el templo y a algunos fieles y peregrinos presentes, que lo recibieron con emoción.
No llevaba los tradicionales atuendos papales, sino que optó por ropa más informal: una camiseta de manga larga, pantalones negros y un poncho a rayas. También llevaba una cánula nasal, que le permite respirar con mayor facilidad.
En la basílica, se dirigió a la tumba del papa Pío X, donde permaneció en oración durante algunos minutos. Los pocos fieles que se encontraban allí siguieron este momento en silencio y con respeto.
Después de la breve visita, regresó a la Casa Santa Marta, donde sigue en reposo. Aunque su agenda sigue siendo limitada, sus recientes actividades indican que se encuentra recuperándose lentamente.
El pontífice recibió al rey Carlos en una audiencia reservada
Previo a su visita a la Basílica de San Pedro, el Papa Francisco mantuvo un encuentro privado con Carlos y Camila en el Vaticano. La reunión, que duró 20 minutos, se celebró a pesar de que el Palacio de Buckingham había cancelado una audiencia oficial debido al estado de salud delicado del pontífice.
Este encuentro marcó el primer contacto entre Carlos, líder de la Iglesia Protestante de Inglaterra, y el Papa desde la ascensión del monarca al trono en 2022.
Durante la conversación, el rey (quien actualmente recibe tratamiento contra el cáncer) y el Papa se desearon mutuamente lo mejor para su salud, de acuerdo con la información brindada por el Vaticano. "Sus Majestades estaban encantados de que el Papa estuviera lo suficientemente bien como para recibirlos y de haber tenido la oportunidad de compartir sus mejores deseos en persona", expresó el Palacio de Buckingham en un comunicado.
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