El príncipe Harry de Gran Bretaña fue acusado este domingo de "intimidación y acoso" por la presidente de una organización no gubernamental que trabaja en África y que él cofundó, pero de la cual tomó distancia tras un conflicto interno.
El hijo menor del rey Carlos III era hasta ahora mecenas de la ONG Sentebale, uno de los pocos compromisos que conservó tras su explosiva ruptura con la monarquía británica en 2020 y la pérdida de su patrocinio real.
Harry cofundó Sentebale cuando tenía 21 años, para continuar la labor de su difunta madre, la princesa Diana, profundamente comprometida en la lucha contra el sida.
Ahora, Sentebale trabaja en particular con niños y jóvenes que se quedaron huérfanos por la epidemia de sida en Lesoto, un pequeño país pobre enclavado en Sudáfrica, y en Botsuana.
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Esta semana anunció sin embargo que abandonaba "devastado" la organización benéfica, después de un conflicto entre los administradores y la presidenta del consejo de administración, Sophie Chandauka, nombrada en 2023.
Chandauka fue también acusada de mala gestión por miembros del consejo de administración, que pidieron su renuncia. El caso se ha remitido a los tribunales.
En una entrevista concedida este domingo a Sky News, Chandauka arremetió directamente contra el príncipe, acusándole de haber hecho todo lo posible para obligarla a abandonar su puesto en la organización.
"Lo que el príncipe Harry quería hacer era expulsarme, y eso duró meses. Se prolongó durante meses, en forma de intimidación y acoso", afirmó. También aseguró que "tenía pruebas de ello".
Según una fuente anónima cercana a los administradores citada por BBC, el príncipe, que vive en California, y su esposa Meghan Markle "esperaban" lo que describieron como una "maniobra publicitaria" urdida por Chandauka.
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Chandauka denunció una cultura del "silencio" en la organización, con miembros de la junta reacios a pronunciarse en contra del duque de Sussex o simplemente a hablar de temas controvertidos.
También se refirió a la pérdida de muchos donantes, que achacó, con documentos justificativos, a la decisión del príncipe de desvincularse de la familia real británica y abandonar el Reino Unido en 2020 para mudarse con su familia a EEUU.
Chandauka habló asimismo de la decisión del príncipe de llevar un equipo de rodaje de la plataforma Netflix -con la que tiene un contrato muy lucrativo- a la recaudación de fondos del año pasado, que se celebró durante un partido de polo.
Las imágenes, que dieron la vuelta al mundo, mostraban una escena bastante extraña entre la presidenta de la organización y la duquesa de Sussex, Meghan, ambas queriendo sostener el trofeo en el escenario.
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Tras el episodio, Harry "me pidió hacer como una declaración para apoyar a la duquesa", dijo Chandauka.
El exdirector del consejo de administración, Kelello Lerotholi, declaró sin embargo a Sky News que nunca había sido testigo de ninguna petición de este tipo por parte del príncipe Enrique.
"Puedo decir sinceramente que en las reuniones a las que he asistido nunca hubo el menor indicio de ello", afirmó.
Lynda Chalker, que fue miembro del consejo de administración de la organización benéfica africana durante casi 20 años, declaró al periódico The Times que el estilo de Chandauka era "casi dictatorial".
AFP / ds