El acto de asunción de Donald Trump como Presidente de Estados Unidos por segunda vez contó con diversos protagonistas a lo largo de la jornada, independientemente del propio mandatario. Líderes como Mark Zuckerberg, Javier Milei, Jeff Bezos y Elon Musk, entre otros, se hicieron presentes durante la ceremonia. Sin embargo, la atención del ojo público también se centró en una figura que, a diferencia del primer mandato de Trump, resultó clave en esta última elección: Barron, el hijo del presidente.
Durante la primera investidura de su padre, Barron tenía apenas diez años, lo que hizo que su figura pasara casi inadvertida. Sin embargo, ocho años más tarde, todas las miradas se centraron en él durante la ceremonia que tuvo lugar en Washington D.C.
El joven, quien actualmente tiene 18 años, nació en Nueva York el 20 de marzo de 2006. En junio de 2017, se convirtió en el primer niño en vivir en la Casa Blanca desde John F. Kennedy Jr., según el diario Today. En 2020, se instaló junto a su madre Melania en Palm Beach, Florida, donde asistió a la academia privada Oxbridge Academy. Se graduó en mayo. Ahora, estudia en la Stern School of Business de la Universidad de Nueva York. Pero…¿qué tiene que ver el hijo del mandatario con la campaña presidencial trumpista? ¿Por qué resulta una figura importante para el segundo mandato de su padre?
Con una formación marcada por una perspectiva internacional, Barron creció rodeado de idiomas y culturas. Aprendió esloveno gracias a su madre y, según su padre, incluso estudió chino en su infancia. Y aunque siempre evitó el foco mediático, su papel en la reciente campaña presidencial de su padre tomó a muchos por sorpresa.
Jason Miller, asesor del presidente, reveló que el joven aportó ideas claves a la estrategia digital, sugiriendo apariciones en podcasts de gran popularidad para conectar con las generaciones más jóvenes. Fue por las decisiones de su hijo que Donald apareció en programas de gran alcance como los de Joe Rogan, Theo Von y Logan Paul,. Nada fue al azar: buscaban conectar con el público masculino más joven, entre los 18 y 28 años. De hecho, y analizando los números de los comicios norteamericanos, se evidencia que el 56% de los votantes de este segmento respaldaron a Trump en 2024, frente al 41% que lo hizo en 2020, según el Centro de Información e Investigación sobre Aprendizaje Cívico.
Derechas radicales: una realidad que avanza con la asunción de Trump
Barron arribó al Capitolio luciendo un traje azul marino, combinado con una camisa blanca y una corbata del mismo tono. Como detalle, llevaba en la solapa un broche con la bandera de Estados Unidos, reflejando el peso del momento que estaba viviendo. Su entrada fue junto a su madre y su abuelo paterno, Viktor Knavs.
Una vez dentro del icónico Capitolio, Barron tomó asiento en la segunda fila, justo detrás de su padre y a la derecha de su madre. Esta ubicación, cargada de simbolismo, dejó en claro que el joven de 18 años se convirtió en un pilar fundamental para su padre en esta nueva etapa. Su presencia, discreta pero firme, no pasó desapercibida entre los asistentes. El acto contó con el respaldo de toda la familia presidencial, incluida Melania y los cinco hijos del mandatario: Donald Jr., Ivanka, Eric, Tiffany y Barron.
Barron Trump no vivirá en la Casa Blanca
A diferencia de los años anteriores, ni Melania Trump ni su hijo menor, Barron, se trasladarán a la Casa Blanca durante este segundo mandato presidencial. El joven de 18 años inició su formación universitaria en la prestigiosa Stern School of Business de la Universidad de Nueva York y optó por establecerse en la Trump Tower, ubicada en Midtown Manhattan. Según declaraciones de Melania, estas decisiones reflejan las prioridades y autonomía de Barron en esta nueva etapa de su vida.
A pesar de no residir en la mansión presidencial, Barron contará con una habitación asignada en el 1600 de Pennsylvania Avenue, lo que le permitirá visitar a su padre con total libertad. Este arreglo, similar al del resto de la familia Trump, asegura que el vínculo familiar se mantenga cercano a lo largo del mandato.
“Lo que él quiera hacer está bien”, expresó Melania para Fox News el pasado 13 de enero. “Siento que, como niños, los tenemos hasta que tienen 18 o 19 años. Les enseñamos, los guiamos y luego les damos alas para volar. Siempre respeto el sí y el no de Barron, y lo que le gusta hacer, dónde le gustaría estar”, añadió.
TC