Horas después de que se conociera la denuncia por presunto hostigamiento del Camarista de Casación Gustavo Hornos a su expareja, el cuerpo presidido por Mariano Borinsky convocó a una reunión de superintendencia.
Del encuentro realizado cerca del mediodía de ayer participaron los presidentes de las cuatro salas que conforman el tribunal penal que antecede a la Corte Suprema. En los pasillos del primer piso de los tribunales de Retiro había gran expectativa sobre si se hacía la más mínima mención sobre el asunto, finalmente no ocurrió.
El magistrado Hornos, con una extensa carrera en la Justicia Federal quedó en jaque tras la medida precautoria dictada por la jueza civil Paula Marinkovic quien ordenó que no se acerque a menos de 200 metros de Tatiana Sicardi, su antigua pareja. En esa línea se dispuso que tampoco establezca comunicación de ningún tipo: correo electrónico, telefónica, digital o por terceros por un plazo de 90 días.
Fuentes conocedoras de la causa sostienen que Sicardi decidió iniciar la denuncia ante la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte, luego que Hornos decidiera finalizar el vínculo que tenían desde hace varios meses y plantearle que hiciera un tratamiento psicológico. Dentro del edificio de Comodoro Py dan cuenta de varios escandalosos episodios donde Sicardi terminaba a los gritos.
La noticia generó una víspera de preocupación en el preámbulo de la reunión de acuerdos porque, además, la denuncia se contempló en la síntesis de prensa de la Corte que recibe la Cámara Federal de Casación.
Finalmente se dio la reunión de la que participaron los jueces Mariano Borinsky como titular del cuerpo, Juan Carlos Gemignani, Daniel Petrone, Ángela Ledesma de forma remota y el propio Gustavo Hornos. No hubo ningún tipo de mención sobre la denuncia ni tampoco se elevó o recibió presentación alguna sobre el camarista.
Sicardi también denunció a Hornos en el fuero penal. De acuerdo a la presentación, la mujer sostuvo que varios tocamientos que le habría hecho el juez en sus partes íntimas en medio de la relación consentida le generaron sangrado.
El camarista Hornos preside la sala IV de la Cámara Federal de Casación que complementan Diego Barroetaveña y Mariano Borinsky. Es la misma sala que ratificó la sentencia a Amado Boudou en la causa Ciccone, avaló la prisión perpetua al femicida de Wanda Taddei, Eduardo Vázquez y tiene pendiente resolver si confirma, morigera o revoca la condena contra Cristina Kirchner en la causa Obra Pública, además de evaluar el planteo de inhibición de bienes de Alberto Fernández y otros en “Nación Seguros” y analiza la condena del exJuez Federal, Carlos Soto Dávila, acusados de recibir coimas para beneficiar a narcos y criminales en Corrientes.
