La cordobesa Carolina Scotto renunció a su banca de diputada nacional por diferencias políticas con el bloque kirchnerista, aunque aún la decisión no fue oficializada por las autoridades de la bancada del Frente para la Victoria.
Fuentes del oficialismo citadas por el diario La Voz del Interior indicaron que la ex rectora de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC) venía mostrando su disconformidad por falta de "espacios" en la Cámara Baja y finalmente ayer presentó su dimisión ante el presidente de la Cámara, Julián Domínguez.
En la Cámara baja trascendió que Domínguez trató de convencer a la legisladora para que revea su decisión, pero la legisladora cordobesa mantuvo su posición.
Scotto será reemplazada por el intendente de Villa del Totoral, Ernesto "Tatú" Bernabey, quien la seguía en la lista de candidatos en las elecciones del año pasado. La referente cordobesa encabezó la lista del Frente para la Victoria en las elecciones legislativas del año pasado, cuando el kirchnerismo obtuvo el 15,3 por ciento de los votos, ubicándose en tercer lugar, detrás de Unión por Córdoba y la UCR.
La diputada habría quedado muy golpeada cuando no fue designada como presidenta de la Comisión de Educación, cargo que en principio iba a ser para el radical Julio Cobos, pero el kirchnerismo vetó su candidatura y actualmente es conducida por la vicepresidenta primera Stella Maris Leverberg, del Frente para la Victoria.
Según los allegados a Scotto, esta habría sido una promesa cuando en la Casa Rosada le ofrecieron ser legisladora. Las diferencias entre Scotto y el kirchnerismo quedaron al descubierto en el reciente congreso de Unidos y Organizados que se llevó a cabo en Córdoba, donde la diputada se negó a subir al palco cuando el secretario de Legal y Técnica, Carlos Zannini, cerró el acto.
