El campo “El Entrevero”, que había sido comprado por el empresario relacionado con el kirchnerismo Lázaro Báez, fue subastado esta tarde en el hotel Jeans Clever de Punta del Este. La base había sido fijada en 3,5 millones de dólares, pero el precio escaló rápidamente y la propiedad se remató en 10.800.000.
A pesar de las múltiples ofertas, solo una se quedó con el botín: la que realizó la sociedad de Eduardo Costantini y Adolfo Cambiaso. Se trata de una empresa uruguaya que forma parte de Consultatio, compañia que preside Costantini, fundador de Nordelta. Luego de la adquisición, voceros de la empresa detallaron que todavía “no saben” qué tipo de proyecto llevarán a cabo en el lugar, pero se encargaron de dejar en claro que “lo harán con mucho entusiasmo”.
El lugar que se remató no es un campo cualquiera. Y es que sumado a las tres condenas por corrupción que pesaban sobre Báez, se agregó la de lavado de dinero en Uruguay por la compra de dicho terreno. Este cuenta con 152 hectáreas sobre las costas del mar y está ubicado cerca de José Ignacio. En parte de esa propiedad reside el campo subastado hoy.
Independientemente de sus otras causas, la compra de El Entrevero le proporcionó cuatro años y medio de cárcel más a Báez. Pero no solo él resultó afectado: el financista Leonardo Fariña, que había intervenido en la operación, fue condenado a dos años y medio de prisión. Sin embargo, logró la reducción de la pena en un año por sus aportes como “arrepentido”. En aquel entonces, el Tribunal Oral Federal N 4 decomisó a los dos acusados un total de 14.800.000 dólares.
El empresario ya había sido condenado a 10 años de prisión por lavado de dinero en la causa conocida como “La ruta del dinero K”. De allí surgió el expediente por El Entrevero. Se lo juzgó por llevar a cabo transferencias al exterior desde la financiera de Puerto Madero conocida como La Rosadita. Esos fondos viajaron por cuentas de bancos suizos y terminaron en poder de la familia Báez.
En el juicio se evaluó, además de la adquisición del campo "El Entrevero", la compra de un terreno en Maldonado valuado en 320.000 dólares. Esta operación involucró a las empresas Traline SA y, posteriormente, Jumey SA. Los pagos se realizaron en tres instancias: el 24 de febrero de 2021, Danifort International Corp transfirió 49.987 dolares; un segundo pago por el mismo monto fue efectuado más tarde por la misma compañía; finalmente, el 16 de agosto de 2011, otra entidad completó el proceso con un aporte de 99.955 billetes norteamericanos.
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Costantini, tras la compra: "Queremos ser parte del cambio histórico"
El empresario, que pagó 11 millones de dólares en la subasta, triplicó el valor base que fue de 3,5 millones. Luego de comprarlo, habló con La Nación y explicó: “Es un terreno con 415 metros de frente y doble salida. Ya funcionaba un club de polo y la idea es redoblar la apuesta”. Además, explicó que obtuvo un acuerdo estratégico con Adolfo Cambiaso a quien conoce desde su infancia. “Soy íntimo amigo de su padre cuando hacía windsurf. Conozco a toda la familia desde hace 30 años”, indicó.
Además reveló que esta semana también adquirió otra tierra en Carrasco, en la ciudad de Montevideo. En diálogo con el mismo medio, indicó: “El cambio y la flexibilización de regulaciones en la inmigración de los caballos convertirá a Uruguay en un centro natural de polo referente en el mundo como sucedió en Palm Beach. Queremos ser parte de ese cambio histórico. Además Punta del Este será un punto clave a nivel internacional por la cantidad de extranjeros que todos los años visitan la ciudad, y para quienes el programa de polo es parte de su agenda central”.
TC / Gi