POLITICA
Agro

Para Salvador di Stéfano, la sequía puede poner en riesgo el plan económico de Javier Milei por la falta de divisas

El economista sostuvo que la falta de lluvias afectaría la cosecha y, por ende, la liquidación del agro del próximo año. La relación con el cambio climático y la "mentira socialista".

Salvador Di Stefano, economista
Salvador Di Stefano, economista | Perfil Cedoc

El economista Salvador Di Stéfano sostuvo que una posible sequía podría poner en riesgo el plan económico del Gobierno por la baja liquidación de divisas del agro durante el próximo año. Mientras especialistas alertan sobre las consecuencias del cambio climático, como la escasez de precipitaciones, el presidente Javier Milei niega su existencia y asegura que se trata de una “mentira del socialismo”. 

“Si no llueve en 100 mm de agua se ponen en riesgo la cosecha del año que viene y la sostenibilidad del plan económico por la escasez de divisas que puede provocar”, afirmó Di Stefano en el evento  "Perspectivas Económicas 2025" realizado en la Universidad Siglo XXI de Córdoba y organizado por Pago TIC.

Esta declaración se vincula con las proyecciones realizadas por la Organización Meteorológica Mundial (OMM) que afirman que la sequía que afectó a la Argentina en 2023 podría volver a golpear la región durante los últimos meses del 2024 y en 2025. La fecha del posible retorno del fenómeno seco es clave porque podría coincidir con los inicios de la siembra de trigo, maíz y soja para la campaña del próximo año.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite

600.000 hectáreas de trigo podrían verse afectadas por la sequía: “La caída de la rentabilidad rondaría el 50%”

De esta manera, el analista especializado en proyecciones macroeconómicas concluyó que la manera para que el país crezca es a través del “aumento de productividad de la economía mediante reformas estructurales, incentivos al crecimiento, inversión en infraestructura y desregulación del Estado”. 

Milei niega el cambio climático y la sequía amenaza su plan económico

En reiteradas ocasiones el presidente Javier Milei negó los efectos del cambio climático y sostuvo que se tratan de “mentiras del socialismo”. Sin embargo, la sequía que podría poner en juego su gestión económica sería una de las consecuencias de esta problemática, según afirman los expertos. 

"El calentamiento global es otra de las mentiras del socialismo. Hace 10 o 15 años se discutía que el planeta se iba a congelar. Ahora discuten que se calienta, aquellos que conozcan cómo se hacen esas simulaciones van a ver que las funciones están sobresaturadas en determinados parámetros a propósito para generar miedo", fue una de las declaraciones más polémicas de Milei sobre el tema. 

Milei

Sin embargo, en los debates presidenciales del año pasado, aclaró que no niega el cambio climático, sino que “existe un ciclo de temperaturas". "Este es el quinto punto del ciclo (el de mayor calor), la diferencia con los cuatro anteriores es que no estaba el ser humano y ahora sí. Las políticas que culpan al ser humano son para recaudar y financiar vagos socialistas de cuarta que escriben papers", dijo.

En este sentido, durante su presentación de este año en el Foro Mundial de Davos, Milei señaló: "Otro de los conflictos que los socialistas plantean es el del hombre contra la naturaleza. Sostienen que los seres humanos dañamos el planeta y que debe ser protegido a toda costa, incluso llegando a abogar por mecanismos de control poblacional o la tragedia del aborto". 

Y disparó: “Lamentablemente, estas ideas nocivas han pregnado fuertemente en nuestra sociedad. Los neo-marxistas han sabido cooptar el sentido común de occidente”. 

Clima extremo: en 2024 termina "El Niño", volvería "La Niña" y ¿puede haber una nueva sequía?

La sequía como consecuencia del cambio climático

Si bien en Argentina la falta de precipitaciones estaría asociada al fenómeno La Niña, según la OMM, científicos alertaron sobre los vínculos que podría haber entre el cambio climático y las sequías cada vez más frecuentes en la región. 

La Niña forma parte de un ciclo natural-global del clima conocido como El Niño-Oscilación del Sur (ENSO) y es producto del cambio de temperaturas del Océano Pacífico ecuatorial, en especial en sus regiones central y oriental. Cuando sucede este fenómeno natural, la primavera y el verano suelen tener lluvias por debajo de lo normal y hasta puede provocar sequías como las que ocurrieron entre 2022 y 2023.

El fenómeno tiene una periodicidad irregular y suele ocurrir cada dos a siete años. Según el Servicio Meteorológico Nacional, una fase La Niña se declara cuando las temperaturas del mar en el Pacífico oriental tropical disminuyen 0,5°C por debajo del promedio durante varios meses consecutivos (5 trimestres).

Sequía

Si bien la llegada de esto implicaría un descenso de temperaturas en el mar, el secretario general Adjunto de la OMM, Ko Barrett aseguró que “no implica una pausa en el cambio climático de largo plazo, dado que nuestro planeta sigue calentándose por efecto de los gases de invernadero”. 

En esta línea, un estudio reciente de World Weather Attribution (WWA) sostiene que el cambio climático fue el principal culpable de la devastadora sequía en la región amazónica del año pasado, mientras que los científicos descubrieron que el fenómeno meteorológico El niño jugó un papel menor.

“Cuando la sequía amazónica empeoró en 2023, muchos apuntaron a ENSO para explicar el suceso”, dijo Ben Clarke, autor principal del estudio. “Si bien condujo a niveles aún más bajos de precipitaciones, nuestro estudio muestra que el cambio climático es el principal impulsor de la sequía a través de su influencia en las temperaturas más altas”.

La sequía avanza y genera preocupación en el campo

En un mundo con un calentamiento de 2°C por encima de los niveles preindustriales, el Amazonas podría sufrir cuatro veces más sequías agrícolas de esta magnitud cada 10 a 15 años, lo que significaría una reducción de las precipitaciones, el agua del suelo y los niveles de los embalses, encontraron los investigadores.

Además, aseguraron que la estación seca se está alargando, lo que sería una señal peligrosa para el futuro. “La región debe estar mejor preparada para la sequía”, dijo Simone Athayde, antropóloga ambiental e investigadora de la Universidad de Florida, y concluyó: “Más que nunca, necesitamos controlar la deforestación y promover la restauración”. 
 

 

RV / Gi