El exabrupto del periodista Jorge Lanata al pedir que "los compañeros de colegios les digan a los hijos de Farah, Freiler y Ballestero ‘che, ¿tu papá hizo eso?’" generó un fuerte revuelo en el ámbito judicial. El primer camarista que recogió el guante fue Eduardo Freiler, quien señaló que hay medios "que más que informar buscan formar opinión".
"(El llamado a linchamiento mediático) lo viví con asombro y molestia, en lo que atañe a mi persona. Quienes trabajamos en cargos públicos estamos acostumbrados a ser interpelados, por alumnos, colegas e incluso por la gente", consideró el funcionario judicial. "Pero cuando este tipo de agresión clara está dirigida contra los hijos me parece algo inédito, ni siquiera se hizo en la Dictadura", lanzó.
El camarista repudió el pedido de escrache a sus hijos por parte del conductor de Periodismo Para Todos y lo calificó de "inédito y atroz". "No nos vamos a dejar manejar por los tiempos de un conductor de un programa", expresó en radio América.
Freiler asumió que los magistrados están "acostumbrados a ser interpelados por alumnos, colegas y por la gente". Sin embargo, subrayó su disgusto con el pedido del periodista porque "este tipo de agresión dirigida contra los hijos me parece algo inédito, ni siquiera se hizo en la dictuadura".
"Mis hijos han tenido comentarios de sus compañeros en su escuela, e incluso de sus profesores, pero para solidarizarse con ellos, con lo que estaban pasando. Las nuevas generaciones parecen ser más tolerantes", contó el juez.
En tanto, descartó los "rumores mediáticos" sobre el caso Ciccone y puso de ejemplo el memorándum de entendimiento con Irán. "Decían que íbamos a fallar en favor del gobierno, y no fue así", apuntó.