El presidente Javier Milei y el ex mandatario Mauricio Macri volvieron a reunirse en la Quinta de Olivos en la noche del martes, en el contexto de un ambivalente escenario de acuerdos y tensiones entre el oficialismo y el PRO.
Milei y Macri protagonizaron otra cumbre a puertas cerradas en Olivos: la última había tenido lugar el pasado miércoles por la noche, luego de aquella votación que significó un revés para La Libertad Avanza, tras el rechazo parcial del DNU 656/2024, el polémico decreto puesto en marcha para destinar 100 mil millones de pesos para fondos reservados de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).
El mandatario nacional recibió una vez más al líder del PRO para cenar en la Quinta de Olivos, en un encuentro concertado a último minuto, lo que puso de manifiesto el grado de cercanía entre ambos dirigentes, con la posibilidad de que estas conversaciones abran la puerta a un acuerdo político sujeto a confirmación en el transcurso de la semana.
Qué se sabe de la nueva cumbre en Olivos entre Milei y Macri para poner paños fríos al conflicto
Los vaivenes del macrismo con Milei responden al dilema que divide al partido amarillo hace meses: ¿alianza u fusión? El ex presidente por un lado, y Patricia Bullrich por el otro, ya expresaron su posición al respecto y hasta hubo intercambios de declaraciones, con una ministra de Seguridad que, desplazada de la presidencia del partido, insiste en que el PRO "debe ser oficialista".
La pulseada por el momento no termina de definirse, y la ecuación se complica por el malestar de varios gobernadores de Juntos por el Cambio, que mantienen roces con el Ejecutivo por los fondos coparticipables, una pelea que no desapareció con la firma del Pacto de Mayo.
En medio de este esquema complejo e inestable, el PRO también tendrá que definir un posicionamiento específico de cara a las elecciones legislativas del próximo año.
De hecho, más allá de que el oficialismo sabe que su agenda legislativa depende el gran medida de las bancas del PRO, la estrategia electoral de 2025 aparece en el horizonte inmediato de ambos partidos.
Todavía no hay una posición tomada, pero la frecuencia de las conversaciones entre Milei y Macri hablan de una coordinación notable entre el LLA y el PRO, a pesar de las recientes desavenencias generadas por los fondos reservados de la SIDE.
Sintonía Macri-Milei
En lo que respecta a los últimos gestos de Mauricio Macri, al término de la semana pasada procuró apaciguar las tensiones con el oficialismo y en sus redes sociales se pronunció a favor del veto de Milei a la reforma jubilatoria.
El respaldo de Macri se materializó justamente a pocos días de haber cenado milanesas junto al presidente en Olivos, una reunión de "urgencia" que improvisaron de un momento a otro cuando el Gobierno recibió un cimbronazo inesperado en el Congreso, justo cuando parecía sacar provecho de las denuncias contra el presidente Alberto Fernández.
La decisión de Macri de no apoyar al Gobierno en lo que atañe al decreto de la SIDE representó un mensaje hacia adentro del partido y también hacia la Casa Rosada.
Desde la llegada de Milei al poder, el PRO lo acompañó en todas las votaciones, aunque en los últimos tiempos comenzó a marcar diferencias con los libertarios.
Esa postura de tomar distancia es la contracara de un feroz debate realizado puertas adentro del PRO sobre si conviene mantenerse al margen y competir en soledad o avanzar hacia una fusión con La Libertad Avanza el próximo año.
Macri sabe que esta decisión que debe adoptar el espacio nacido en la Ciudad de Buenos Aires es crucial para su futuro, ya que un acuerdo definitivo con LLA dejaría abierta la posibilidad de su disolución.
En 2025 el oficialismo no arriesga bancas y su objetivo es hacer la mejor elección posible, de tal forma de quedar bien posicionado en ambas Cámaras para tratar los proyectos de la segunda mitad del mandato.
Con ese objetivo como rumbo, los libertarios buscan mantenerse cerca de Macri y del PRO, una alianza que no termina de conformarse por los chispazos que mantiene el ex mandatario con los colaboradores más cercanos del presidente.
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