La central que dirige Hugo Moyano confirmó en el plenario de delegaciones regionales, organizado el martes en la sede gremial de la calle Azopardo, que no habrá un nuevo llamado a huelga. Sí hubo, en cambio, nuevos mensajes en favor de la unidad con la CGT que dirige el metalúrgico Antonio Caló.
Ayer, el secretario de Interior de la CGT de Moyano, Gerónimo Venegas, se mostró esperanzado en que pronto habrá novedades. “Estamos a pasos agigantados caminando hacia la unidad del movimiento obrero. Ya ha habido conversaciones, y creemos que a lo mejor el mes que viene o más adelante estaremos en condiciones de emitir un comunicado”, declaró Venegas, uno de los referentes que realizaron los contactos con los sindicatos oficialistas.
Los gestos de la central opositora fueron correspondidos por el sector más afín al kirchnerismo. El propio Caló, Gerardo Martínez (Uocra) y el nuevo secretario general de Luz y Fuerza, Guillermo Moser, destacaron en los últimos días que la unidad también es un objetivo de la CGT oficial.
El proceso de convergencia implicaría un paso al costado de los dos secretarios generales. Justamente este punto fue uno de los más remarcados por parte de la comisión directiva que preside Moyano. “Nuestras renuncias están a disposición”, destacó Juan Carlos Schmid durante la conferencia de prensa posterior al plenario del martes.
El líder de la CGT Azul y Blanca, Luis Barrionuevo, aclaró a PERFIL que su sector no mantiene contacto con la central peronista más afín al Gobierno. “Por ahora, nosotros no tenemos ninguna perspectiva de unidad con la CGT Caló”, explicó el dirigente gastronómico. También dijo que tras el paro del 28 de agosto había “unanimidad” sobre la imposibilidad de realizar en lo inmediato otra huelga. “Por ahora está en stand by”, explicó. Sin embargo, insistió en que “había expectativas de organizar una gran marcha con los estudiantes, el campo y, por supuesto, el movimiento obrero”.
Sin un paro o marcha en el horizonte, el sector que dirige Moyano organizará en las próximas semanas reuniones políticas para expresar su preocupación por el crecimiento del delito. Aspiran, incluso, a mantener un encuentro con el secretario de Seguridad, Sergio Berni.