POLITICA
estaba en el otamendi fuera de peligro

Máximo Kirchner fue intervenido anoche en el hígado

Movimiento. Varios autos con custodia entraron al Otamendi por la tarde. El hijo de la Presidenta permanecía ahí anoche.
| Cedoc

El hijo de la Presidenta y diputado electo, Máximo Kirchner, fue operado ayer de un absceso hepático de origen diverticular y según se informó anoche estaba fuera de peligro. Cristina Kirchner, junto al resto de la familia, estuvo acompañándolo en el Sanatorio Otamendi.
Un absceso hepático es una masa llena de pus dentro o asociada al hígado. Al parecer, habría sido una consecuencia de una infección en los intestinos. En la intervención le hicieron una punción en la zona y “se le realizó un drenaje percutáneo, que ha sido exitoso”, según el parte médico que se dio a conocer al cierre de esta edición.

La intervención estuvo a cargo de los doctores Pedro Ferraina y de Francisco Suárez Anzorena. Y se encuentra “clínicamente estable, en proceso de recuperación”, de acuerdo al parte de la dirección médica del Otamendi.
Hasta dicho anuncio, ninguna fuente oficial confirmaba el rumor de internación que había comenzado a circular a la tarde.
El jueves, por un dolor en la zona del hígado, el líder de La Cámpora fue a la misma clínica a hacerse un análisis de laboratorio, de acuerdo a las fuentes médicas. Estuvo alrededor de media hora. Después permaneció en la Quinta de Olivos descansando con visible malestar.
En las afueras del Otamendi, en tanto, hubo durante el día movimientos de varios autos particulares y hasta presencia de diferentes medios de comunicación.

El Sanatorio Otamendi es el lugar preferido de la familia presidencial y de varios funcionarios del gabinete kirchnerista. La Presidenta y su hija Florencia se atendieron allí en varias oportunidades. La jefa de Estado fue allí con un cuadro “febril infeccioso” y también cuando tuvo un problema en su tobillo.
El motivo de la elección del Otamendi es que el jefe de urgencias de la entidad, Carlos Karmazyn, pertenece a la Unidad Médica Presidencial. Allí fueron atendidos también el ministro De Vido y el jefe de los espías, Oscar Parrilli.

Esto no les gusta a los autoritarios
El ejercicio del periodismo profesional y crítico es un pilar fundamental de la democracia. Por eso molesta a quienes creen ser los dueños de la verdad.
Hoy más que nunca Suscribite