La sede de Balcarce al 400, donde en los cinco pisos funciona el PRO nacional pero también los comandos de campaña de otros distritos, se volvió a llenar de dirigentes y militantes. Y ese fue el escenario de una cumbre ayer de la mesa ejecutiva del partido que preside Mauricio Macri para empezar a delinear la estrategia electoral.
El tema central fue la Provincia, donde Diego Santilli y Cristian Ritondo venían, apenas cuatro días atrás, de fotografiarse en Casa Rosada con el presidente Javier Milei, Karina Milei y los armadores libertarios Lule Menem y Sebastián Pareja.
En ese marco, el expresidente expresó ayer: “He escuchado mucho hablar al presidente de que quiere hacer una unión total con el PRO hacia el futuro para hacer la refundación de la Argentina, pero de eso, concretamente, no ha pasado nada”.
Y precisó, consultado por la prensa sobre su opinión acerca de la posibilidad de una alianza entre La Libertad Avanza y el PRO en la provincia de Buenos Aires, su apoyo: “Absolutamente”, respondió, aunque aclaró que “todavía estamos en la fase de palabras y fotos”.
“Se les pidió que, por sí o por no, sepamos dónde vamos”, aseguró sobre las motivaciones reales de ese encuentro. En sentido contrario, Macri destacó que en la Ciudad de Buenos Aires “no ocurrió” ningún acercamiento y, cuando se le preguntó a qué se debió, respondió: “Es difícil saber”.
En este marco, en la cumbre reservada con la mesa ejecutiva del PRO, a la que se sumaron otros dirigentes y diputados que no suelen formar parte de esos encuentros, se habló más de una hora.
Entre otras cuestiones quedó claro que cada distrito hará los acuerdos que convengan de acuerdo a la realidad provincial. Por ello, por caso, en Santa Fe el PRO va con la UCR en las elecciones anticipadas, donde el gobernador Maximiliano Pullaro tiene todo para ganar. Allí LLA podría salir cuarto cómodo tras decidir ir solo.
Otra idea que se descartó fue una frase de comienzos de año del presidente Javier Milei, quien dijo que “o iban juntos el PRO y LLA en todos lados o en ninguno”. “Quedó demostrar que no va a ser así”, se escuchó. En Chaco pasa algo similar: hay acuerdo. Pero en la Ciudad, está más que claro, no hubo pacto.
Jorge Macri les viene pidiendo a todos los actores del interior y de la Provincia que no se cierren estos acuerdos distritales, en la medida en que puedan, hasta que no se defina la elección porteña. Ese pedido fue tomado en cuenta.
Dado que las elecciones en CABA son el 18 de mayo, por caso, en la Provincia ni Santilli ni Ritondo tienen el apuro de sellar un acuerdo antes de esa fecha si los comicios son en octubre en la Provincia.
En el encuentro en San Telmo, a cuatro cuadras de la Casa Rosada, tampoco se volvió a tocar el tema de la expulsión de Patricia Bullrich y de Horacio Rodríguez Larreta del partido. En rigor, en el momento en que Larreta anote su candidato, el sábado 29 de este mes, por fuera del PRO, según la carta orgánica partidaria, ya estaría en condiciones de ser expulsado.
Pero el tema hoy no es prioridad. A pesar del entusiasmo de algunos dirigentes que lo ven bien. Para Mauricio Macri la prioridad absoluta es ganar la Ciudad, aunque sea por una exigua diferencia.
En ese marco, María Eugenia Vidal se puso el traje de jefa de campaña de la Ciudad, aunque no quiere ser candidata bajo ningún concepto. Siguen intentando convencerla pero el hecho de que su amigo desde hace 30 años, Larreta, sea candidato, no le gusta nada. Enfrentar a un amigo es duro, y más cuando se espera una campaña áspera a todo nivel en Capital Federal.
Con todo en el PRO ya empezaron los primeros ruidos en el territorio. En especial con César “el Tuta” Torres, el secretario de Gobierno, quien es resistido por buena parte de los comuneros del PRO. Muchos de ellos comenzaron a plantear a Vidal que prefieren hablar directamente con ella antes de seguir relacionándose con Torres, cuyos modos son motivo de comentarios en Uspallata desde el año pasado.
Por lo pronto Sergio Siciliano, el legislador porteño que Vidal puso como enlace, viene recepcionando críticas parejas hacia “el Tuta”, un histórico asesor del jefe de Gobierno que pasó por la Legislatura bonaerense años atrás.
Con todo, el flamante ministro de Desarrollo Económico, Hernán Lombardi, en su debut en el gabinete porteño, comenzó a tomar la vocería de la campaña también. Aunque no está confirmado que sea candidato, Lombardi va a ser una voz importante para el PRO.
Claro que no todos trabajarán igual: se vio hace dos viernes en un acto, cuando Vidal hablaba, Lombardi escuchaba y Torres miraba su celular.
