Las imágenes de Santiago Caputo patoteando a un diputado nacional (en este caso Facundo Manes) recorrían los portales de todo el país. El asesor estrella, supuesto estratega infalible, había cometido un nuevo error no forzado. El anterior había sido cuando se metió a editar la charla del presidente Javier Milei con Jonatan Viale. La grabación sería editada para el público. Pero el crudo de la supuesta nota dio vueltas por muchas manos y terminó publicada sin los cortes en la web. El mago del Kremlin estaba solo. Y no parecía el hombre brillante que marcaban algunas crónicas de periodistas amigos.
Si bien mantiene la confianza total de Milei, Caputo viene de meter los dedos en el enchufe con la licitación de la Hidrovía. Días más tarde para editar una nota por el escándalo de $Libra, donde aún no hay una respuesta concreta de su responsabilidad o la de la hermana del Presidente Karina Milei. ¿Será cierto que una consultora que maneja muy bien el lobby de "asuntos públicos" llegó a Mauricio Novelli recomendado por un sector de Casa Rosada?
Por lo pronto Hayden Davis sigue mandando mensajes para abrir una negociación con el Gobierno. Lo hace a través de su abogada Yanina Nicoletti que deja correr la idea de que su defendido podría ser testigo arrepentido ante los Estados Unidos. Allá no se juega el juego de Comodoro Py. Lo sabe el ministro de Justicia Mariano Cuneo Libarona. Este miércoles habrá novedades de la causa en Argentina. Anticipó Romina Manguel en Opinión Pública que el fiscal Eduardo Taiano pedirá la ubicación de las celdas de los celulares de Novelli y Davis, entre otros. Sobre todo cuando ingresaron a Casa Rosada o a la Quinta de Olivos. ¿Con quiénes hablaron? ¿Quiénes los dejaron entrar?
En simultáneo, ante la pregunta de PERFIL de quien había armado la estrategia de enfrentamiento con Axel Kicillof, un ministro que detesta a Caputo apuntó contra él. Esto no fue desmentido. Pedir la intervención y renuncia del gobernador de Buenos Aires generó dos consecuencias. La primera, logró unir al peronismo en pos de un enemigo en común. Por primera vez en años Kicillof y Máximo Kirchner estuvieron de acuerdo en algo. Y también Sergio Massa. Así como Cristina Fernández. La segunda, ahora habrá una denuncia penal contra el Presidente. Una más.
Y el sábado le robó -de la peor manera- el protagonismo a su jefe. Milei ya se había cruzado con Manes cuando este le mostró la Constitución al referirse a los jueces de la Corte Suprema que el Gobierno nombró por decreto. Milei aprovechó la cadena nacional para reírse de un diputado ante la sonrisa burlona y el aplauso cerrado de los ministros que parecen obligados a rendir pleitesía como si se tratara de un rey. Ni Guillermo Francos se privó de la risa.
Lo cierto es que la campaña ya comenzó. Y si bien Milei insiste con una alianza con "todos los que quieran destruir al kirchnerismo", la condición es una sola. El que manda es el libertario. Por eso aún Mauricio Macri no tiene una definición tomada, aunque muchos ya juegan a las alianzas locales. "Será una elección para sobrevivir", sentenció un gobernador del extinto Juntos por el Cambio a este medio. Milei ya avisó que comandará la lista de diputados en PBA José Luis Espert. Mala noticia para Diego Santilli que aspira a ser el pegamento ideal entre libertarios y el PRO.
En Capital Federal una encuesta divulgada por el diario Clarín de la consultora de Federico González. Y el primer puesto quedó para Leandro Santoro, peronista que ya fue candidato a jefe de gobierno. Si, un peronista primero en la Capital. Segundo está Ramiro Marra. legislador porteño, también excandidato a jefe de gobierno junto a Milei. ¿El PRO? Tercero, lejos. Para apuntalar esto (y sobre todo la gestión), Jorge Macri desplazó a Waldo Wolff del ministerio de Seguridad, cambió al secretario Legal y Técnico y le dio a Hernán Lombardi Desarrollo Económico, vacante desde que invitaron a irse a Roberto Moritán....el ex de Pampita.
