La Corte Suprema de Justicia de la Nación rechazó un planteo de Sebastián Miguel Pantano, condenado en 2013 por el homicidio de Ezequiel Agrest, mediante el cual pretendía ser incorporado al régimen de libertad condicional. El crimen había ocurrido en 2011 mediante una entradera en el barrio porteño de Caballito.
Pantano fue condenado en 2013 por el asesinato de Agrest, un joven estudiante de cine, hijo de la filósofa Diana Cohen Agrest. El crimen ocurrió el 8 de julio de 2011 en el pasaje Bertrés al 500, donde vivía Lucía Agosta, una compañera de la víctima.
Cuando estaban preparándose para grabar un cortometraje y bajaban cosas de su auto, fueron abordados por el criminal, que los obligó a entrar al domicilio y les pidió todo el dinero que había. En esa situación en donde el atacante estaba insatisfecho con la suma de dinero, ató a Agosta y a su hermano, y cuando Agrest intentó resistirse fue golpeado y disparado en la cabeza por Pantano.
Muestra sobre víctimas de delincuentes reincidentes
Pantano hoy tiene 34 años y es hijo de un ex sargento de la Policía Federal Argentina. Fue detenido en el partido bonaerense de Lomas de Zamora un mes después del crimen.
En 2012, fue condenado a prisión perpetua por el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N°28 porteño, algo que un año después, la Sala II de la Cámara Federal de Casación Penal, alteró, y lo responsabilizó por el delito de “homicidio en ocasión de robo”.
Finalmente, Pantano fue condenado a 18 años de prisión, considerándose cumplida en 2030.
El Juzgado Nacional de Ejecución Penal N° 4 rechazó el pedido de inconstitucionalidad de los artículos 56 bis, inciso 10, de la ley 24.660 y 14, inciso 10, del Código Penal y, en consecuencia, negó la incorporación de Pantano al régimen de libertad condicional.
Asesinan en un robo al hijo de la filósofa Diana Cohen Agrest
La defensa apeló esa decisión y su planteo fue rechazado por la Cámara Nacional de Casación en lo Criminal y Correccional. Contra esta decisión, la defensa presentó un recurso extraordinario federal, que también fue denegado.
Finalmente, tras la presentación de un recurso de queja, el caso llegó al Máximo Tribunal que, con la firma de Horacio Rosatti, Carlos Rosenktranz, Juan Carlos Maqueda y Ricardo Lorenzetti, desestimó el planteo.
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