El presidente Javier Milei finalmente asistirá a la reunión del G20, que se realizará los próximos 18 y 19 de noviembre en Río de Janeiro, Brasil, donde se dará el postergado encuentro con su par de ese país, Lula Da Silva. La confirmación de su participación se había demorado debido a la tensa relación que hay entre ambos.
La reunión entre Milei y Lula sucederá luego de los chispazos y cruces que se repitieron y derivaron en una larga lista de desencuentros y la ausencia del fundador de La Libertad Avanza en la última cumbre del Mercosur, a la que luego asistió la canciller Diana Mondino en representación de la Argentina.
Según fuentes oficiales, Da Silva espera anunciar la firma del demorado acuerdo entre la Unión Europea y el Mercosur, pacto que el embajador argentino en Brasil, Daniel Raimondi, señaló que se encuentra “muy avanzado”, durante su cumbre con la delegación nacional.
Sin embargo, el diplomático nacional no descartó la posibilidad de que la firma se dé, finalmente, en la cumbre de países del Mercosur, prevista para diciembre en Montevideo.
Una vez más, el G20 estará atravesado por la continuidad de conflictos bélicos internacionales como los de Medio Oriente y la guerra entre Rusia y Ucrania. El presidente ruso, Vladimir Putin, ya confirmó que no estará en la ciudad de Río de Janeiro.
Sin embargo, sí dirá presente el jefe de Estado chino, Xi Jinping, quien ya tiene agendado un encuentro con el presidente brasileño y se especula con que podría anunciar la incorporación de Brasil a la ruta de la Franja y la Seda, la iniciativa de integración que encabeza China, su socio en los Brics.
En el Gobierno argentino también piensan al menos en un apretón de manos de Milei con Xi Jinping, en la previa a un encuentro bilateral formal, que podría suceder en la cumbre CELAC (Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños)-China, en Beijing, en abril próximo, antes de la nueva renovación del swap por parte del gobierno chino.
Durante una entrevista con Susana Giménez, el mandatario argentino habló de la relación con el gobierno chino y cambió el tono con respecto a su discurso. “China es un socio comercial muy interesante. No exigen nada, lo único que piden es que no los molesten”, afirmó.
El Gobierno también explicó que, inicialmente, Mondino tendría agenda en esa cumbre unos días antes de la reunión de líderes al igual que el titular de la Unidad G20, Federico Pinedo.
La Cancillería argentina estuvo en contacto con el Palacio Itamaraty para organizar las reuniones de los comités técnicos del G20 y Pinedo encabeza la elaboración del documento final que firmarían los Jefes de Estado.
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