El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se presentará este miércoles 27 de noviembre ante el Senado para dar su informe de gestión, cumpliendo con el artículo 101 de la Constitución Nacional. Este encuentro, programado para las 10 de la mañana, llega en un contexto complicado debido a las discrepancias visibles entre el presidente Javier Milei y la vicepresidenta Victoria Villarruel.
Será la segunda presentación de Francos ante el Congreso y su primera en el Senado, tras haber realizado una exposición el pasado 4 de septiembre en la Cámara de Diputados. En tanto, el último informe en la Cámara alta había estado a cargo de Nicolás Posse, quien asumió el rol de jefe de Gabinete antes de Francos, el 15 de mayo. De esta manera, el 2024 culminará con un total de tres sesiones informativas bajo el mando del actual gobierno libertario.
Los senadores tuvieron hasta el 23 de octubre para remitir más de mil preguntas escritas a la Jefatura de Gabinete. En un principio eran 1.500, pero descartando las repetidas, el número final quedó en 1.100, una cifra significativamente menor a las 2.135 consultas que enfrentó en la Cámara de Diputados en septiembre. Las respuestas a estas consultas ya fueron distribuidas en los despachos correspondientes, marcando el inicio de un debate que se anticipa cargado de análisis y cuestionamientos.
Francos ya respondió por escrito 1093 preguntas, según adelantaron fuentes del Senado. Algunas fuerosn sobre motosierra, Aerolíneas Argentinas, Santiago Caputo y el financiamiento de las universidades. Durante la exposición habrá lugar para las aclaraciones.
Esta comparecencia, que alterna entre las cámaras legislativas según la Constitución, se desarrolla bajo la mirada de la vicepresidenta, quien preside el Senado. Esto añade un matiz político relevante, considerando la relación tensa entre Villarruel y Milei.
La semana pasada, durante una entrevista para LN+, el Presidente afirmó que Villarruel “no participa de las decisiones del Gobierno ni de las reuniones de Gabinete”. Francos confirmó que la comunicación con Villarruel está limitada a los ministros, reforzando la percepción de un quiebre en el diálogo interno.
Paralelamente, el Gobierno evalúa convocar a sesiones extraordinarias para abordar proyectos pendientes, entre ellos, el Presupuesto 2025. El Senado, como representante de las provincias, podría recibir presiones de los gobernadores para que estos temas se traten antes del receso de verano. Sin embargo, aún no hay compromisos concretos desde la Casa Rosada, aunque han surgido rumores de negociaciones individuales con gobernadores, una táctica que ha permitido al oficialismo sortear obstáculos en Diputados.
A pesar del reclamo de gobernadores, corren rumores de que el oficialismo prefiere prorrogar por segunda vez el presupuesto 2023 para manejar los fondos discrecionalmente. El Senado también tenía previsto debatir la ley antimafias, una pieza central de la agenda de seguridad de la cartera de Patricia Bullrich, junto a otros temas pendientes.
FM/LT