“Es una oportunidad perdida. Había un pliego hecho por nuestros técnicos y no le prestaron atención”. Hace meses que Mauricio Macri viene hablando de la Hidrovía. Y viene siguiendo de cerca varios temas de la gestión del gobierno de Javier Milei, entre ellos el megaproyecto de ingeniería fluvial para la navegación a lo largo de los ríos Paraguay y Paraná.
En ese marco, el martes 17 de diciembre habrá un evento con legisladores y técnicos de las tres provincias involucradas (las tres gobernadas por el PRO y la UCR, Entre Ríos, Santa Fe y Corrientes).
La actividad se dará en el marco de la Fundación Pensar que preside María Eugenia Vidal y contará con la colaboración del exministro de Transporte, Guillermo Dietrich, quien había trabajado, con su equipo, sobre el tema.
El espíritu del evento será crítico. Muy crítico, en rigor. En el PRO aseguran que la Casa Rosada había asegurado que las provincias del Litoral iban a ser tenidas en cuenta a la hora de confeccionar los pliegos de licitación. Sin embargo, afirman las fuentes a PERFIL, salió el pliego de licitación “sin ninguna sugerencia de los gobernadores”.
“No hubo respuestas. Los gobernadores (el entrerriano Frigerio, el santafesino Pullaro y el correntino Valdés) están recalientes con el tema porque los afecta de manera directa”, explica una fuente amarilla. Y agrega: “Los jugadores del sector también están críticos, no apoyaron el pliego que se lanzó”.
“Es una vidriera al mundo, tendría que ser el proceso más transparente de todos y tiene críticas de los productores, de los puertos, de las provincias y de los dragadores, salvo alguno en particular. Y lo más grave es el sobrecosto a la producción argentina si se adjudica esta licitación”, lanza otro de los técnicos del PRO que trabajó años sobre la temática.
A esto se le suma otra hipótesis que podría complejizar el panorama: la chance de que la adjudicación se judicialice. Es decir, que se impugne el proceso vía amparos. Y que, ante una medida cautelar, se frene la licitación, se declare nula, y siga de manera directa, como ocurre desde el kirchnerismo.
Paralelamente, a oídos de Macri llegaron ácidas frases de varios funcionarios nacionales con despacho en la Casa Rosada sobre presuntas inconfesables motivaciones para meterse en el tema. “Me quieren descalificar con eso”, se ataja Macri en privado. Y repite el proyecto que elaboraron los técnicos del equipo de Dietrich.
Mientras tanto, Macri volverá en estos días de una gira por Arabia Saudita, Emiratos Árabes y Qatar, donde mezcló actividades de la Fundación FIFA con negocios personales.
Tiene pendiente una actividad sobre inteligenia artificial junto a su primo Jorge y a Vidal, y luego tiene previsto volver al Sur para pasar las fiestas con su familia, como todos los fines de año desde su época de jefe de Estado.
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