Las crisis constantes en los bloques parlamentarios de La Libertad Avanza, con peleas que escalaron sin ningún tipo de freno, no son nuevas y estallaron desde diciembre pasado, con la conformación de las comisiones. Y prometen continuar, pese a la depuración que las altas esferas del partido ordenaron realizar con aquellos díscolos.
Sin vueltas, en la Casa Rosada reconocen que las fracturas que aparecieron tanto en Diputados como en Senado, con integrantes que expusieron a divergencias a cielo abierto, se debe a “malos armados” y decisiones “incorrectas” que se tomaron al momento de conformar las nóminas de candidatos para el Parlamento. “Son cosas que pasan en los partidos nuevos, con cuestiones que se dieron a las apuradas”, dicen en Balcarce 50 en relación con los conflictos en las bancas.
Eso sí: al momento de profundizar sobre quién tomó las determinaciones, las respuestas varían de acuerdo al sector que se consulte. Entre los libertarios de primera hora, se señala con mucho énfasis al rol que tuvo Karina Milei en la confección de las listas nacionales.
La secretaria general de la Presidencia contó con la lapicera y se escudó en gente de su confianza, y allegados, para que aterricen en el Párlamento. Romina Diez, dirigente de Santa Fe, fue uno de los nombres seleccionados, como César Treffinger, el hombre que fue candidato a gobernador de Chubut en 2023 con un magro resultado (obtuvo el 13% de los sufragios).
No obstante, por estas horas, en las filas libertarias le achacan que haya elegido también a Lourdes Arrieta, diputada y apoderada del partido en Mendoza y protagonista de escándalos, con fuertes acusaciones a Martín Menem y con una denuncia a su compañero de cuerpo Nicolás Mayoraz por violencia de género, tras una discusión. Hechos que sirvieron para avanzar con su expulsión de la bancada.
“La denuncia es un disparate. Había 38 diputados presentes y todos me apoyaron cuando se enteraron, fue todo una locura. El bloque me respalda porque es un sinsentido. El fiscal desestimó la denuncia con términos más duros que los que usé yo”, aseguró Mayoraz en una entrevista radial.
Por otro lado, aquellos que están cerca de la influyente funcionaria desestiman cuestionamientos y recargan críticas al exarmador de la fuerza Carlos Kikuchi, quien se alejó tras el pacto entre Javier Milei y Mauricio Macri, como el responsable del arribo de dirigentes sin experiencia y poco leales al proyecto libertario. De hecho, hubo denuncias en la Justicia relacionadas a las compras y ventas de puestos en las boletas.
Y anticipan que las disputas y las bajas pueden continuar, con temor a que se sigan desmembrando los bloques. Por ejemplo, el senador Francisco Paoltroni, quien desafió al asesor Santiago Caputo y criticó a Ariel Lijo, el candidato oficialista para la Corte, es otro de los nombres a expulsar del bloque. El senador, ante los suyos, remarca que solo le debe lealtad al Presidente y que está en la Cámara alta gracias a él, además de que no tiene planes de dejar el bloque.
No es el único libertario que no está alineado: el senador Juan Pagotto tampoco quiere al magistrado en el máximo tribunal. Lo que puede significar otro foco de disputa en el corto plazo.
Con todo, en el oficialismo le aseguran a PERFIL que en los próximos meses serán de trabajo total para fortalecer los armados en las provincias para elegir “mejores postulantes” hacia 2025.
