En el inicio de la gestión de La Libertad Avanza, Rodrigo De Loredo fue uno de los grandes protagonistas. El presidente del bloque radical en Diputados se había convertido en la cara visible de la llamada “oposición dialoguista” y hasta lloró frente a la prensa en febrero cuando se cayó la Ley Ómnibus, el primer megaproyecto legislativo del oficialismo. Pero la cosa está cambiando. Las dos últimas sesiones en la Cámara baja (la de hoy y la de la semana pasada) y el amplio respaldo que obtuvo Mario Negri entre los suyos como candidato para la Auditoría General de la Nación (AGN) son las señales con las que se entusiasman sus adversarios internos.
La UCR tiene su propia telenovela y cada semana suma un nuevo episodio. “Se acabó la paciencia”, repiten los correligionarios de De Loredo que le dan pelea hacia el interior del bloque. En este sector pretenden que la UCR sea una fuerza realmente opositora a Javier Milei. Hasta hace apenas algunos meses eran pocos, ya que la inmensa mayoría de los radicales entendía que su rol era darle herramientas al nuevo Gobierno.
Sin embargo, en las últimas semanas, las líneas del diputado Facundo Manes y del senador Martín Lousteau, que acaba de ser designado al frente de la Comisión Bicameral de Inteligencia, comienzan a tener cada vez más fuerza en detrimento de la línea “amigable” del cordobés. Para más de uno, los fondos reservados para la Side fueron el límite.
Los votos radicales en el DNU de los fondos reservados para inteligencia
El rechazo en Diputados al decreto 256/24, que dispuso un aumento de $100.000 millones de fondos reservados para la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) significó un golpe duro para La Libertad Avanza, pero también puso a la vista la fractura radical.
En total, 22 diputados del bloque radical votaron a favor del rechazo del decreto y solo 8 lo defendieron. Hubo cuatro ausentes, entre los que se contó a De Loredo, que se encuentra en California, donde viajó junto a dirigentes como Cristian Ritondo y Mayra Mendoza para visitar Silicon Valley.
Lo llamativo es que en la sesión anterior, el 14 de agosto, Maximiliano Ferraro de la Coalición Cívica había pedido que se incorporara en el temario del día el rechazo al DNU y solo obtuvo el apoyo de 18 compañeros de banca. Es decir, en apenas una semana la línea dura contra Milei de la UCR logró sumar cuatro votos a favor.
Hubo diferentes cambios de posición. Al igual que De Loredo, Marcela Antola y Mario Barletta acompañaron a Ferraro el 14, pero hoy faltaron. Gerardo Cipolini, en cambio, no acompañó a su compañero de banca en el pedido de incorporar el DNU a la sesión pasada y hoy se ausentó.
Atilio Benedetti, Soledad Carrizo y Roberto Sánchez no acompañaron a Ferraro la semana pasada, pero hoy votaron para rechazar el DNU.
Por último, Martín Tetaz y Francisco Monti, que se abstuvieron en la discusión por la incorporación del DNU al temario el 14, hoy se plegaron a la línea que rechazó los fondos reservados para Inteligencia.
En los papeles, el bloque radical tiene 34 diputados. Pero desde hace unos días se cuentan 33, ya que el dirigente correntino de Encuentro Liberal José Federico Tournier asumió en reemplazo de Alfredo Vallejos, que renunció a su banca para ser ministro de Seguridad en Corrientes. El flamante legislador, de hecho, aseguró a la prensa local que está evaluando formar un monobloque. “Es un adherente a La Libertad Avanza”, aseguraron fuentes radicales.
La actividad económica cayó 3,2% en el primer semestre y se demora la recuperación
Aunque la línea amigable hacia el oficialismo de De Loredo pierda fuerza, el futuro es incierto. En total, 9 diputados del bloque responden a Manes y 6 a Lousteau y Emiliano Yacobitti. “Si se juntan no llegan a la mitad más uno para desplazar a Rodrigo, pero no es que todos los demás sea ‘rodriguistas’ porque tenés muchos sueltos, como Cobos, Barletta o Banfi, que responde a Maximiliano Abad, y que vienen votando diferente a lo que propone De Loredo. Su nivel de apoyo está bajando”, dijo un adversario del cordobés.
La AGN y otro revés para De Loredo
El 30 de julio el presidente del bloque había tenido otro revés que pasó prácticamente desapercibido. En el debate por la representación del partido para la Auditoría General de la Nación hubo una disputa entre Mario Negri y Alejandro Cacace, propuesto por De Loredo.
En la votación, Negri obtuvo 22 votos a favor y Cacace 6. “Al día siguiente De Loredo ‘disimuló’ y publicó en X una foto con Negri hablando maravillas, pero lo cierto es que perdió y por mucho”, agregaron desde el radicalismo.
La representación partidaria en al AGN aún no llegó al Congreso porque todavía están discutiendo sus internas Unión por la Patria, el PRO y los libertarios. Los radicales la resolvieron desplazando al candidato que quería el presidente del bloque. Por ahora, su poder el cordobés solo se respalda en el apoyo de los gobernadores Eduardo Valdés, de Corrientes, y Alfredo Cornejo, de Mendoza.
GL / ds
