"Preocupación" es el sentimiento más común que expresaron varios dirigentes opositores sobre la salud de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner y el hecho de que sea reemplazada por su vicepresidente, Amado Boudou, complicado por diversas causas judiciales.
"La primera preocupación es por la presidenta y la segunda es por el vicepresidente", bromeó el jefe del bloque de diputados nacionales del PRO, Federico Pinedo, cuando fue consultado sobre el tema en diálogo con Radio 10. Y añadió: "No creo que cambie demasiado" el resultado de las elecciones legislativas del 27 de octubre "porque lo que se está votando es a diputados y a senadores, no se está votando a presidente".
En la misma línea, su jefe político, Mauricio Macri, sostuvo que le "preocupa como ciudadano que no haya habido toda la información, que no se hayan puesto los médicos delante de los periodistas para que todos sepamos dónde estamos, sobre todo porque este no es un Gobierno normal, está todo centrado en la Presidenta".
En diálogo con Periodismo Para Todos, el jefe de Gobierno porteño afirmó que "Boudou no tiene mucha autoridad moral ante la población" y que espera "que haya responsabilidad institucional por parte del Gobierno, lo mismo que el PJ, todos ellos tienen que marcar un camino y ver qué es lo que va a pasar".
La exsenadora Hilda "Chiche" Duhalde consideró que "en un país serio, un vicepresidente con tantas causas abiertas tiene que dar un paso al costado. Para mí, como argentina, es vergonzoso que él esté conduciendo el Senado".
"Por mucho menos, ha habido personas que han tenido que dar un paso al costado. Está sospechado de la manera que está sospechado, con el descrédito que tiene dentro de la sociedad. El Gobierno lo entiende porque no hace un traspaso del mando. No me parece que a la sociedad argentina le dé mucha tranquilidad quedar en manos de un vicepresidente que sabe tocar la guitarra", comentó la esposa de Eduardo Duhalde en declaraciones a la radio Once Diez.
"Hoy estamos en una situación institucional, que es mucho más importante que la salud misma de la presidente, porque no creo que sea grave, no deseo que sea grave. Institucionalmente, estamos en un momento difícil. Tenemos que mirar para adelante para que no nos vuelva a suceder esto", continuó Chiche, y dijo que ver a Boudou como conductor del Senado "me produce un gran rechazo. El mismo Senado, los mismos senadores, deberían pedirle que no esté ahí, por lo que representa".
Antes de que se concrete efectivamente el paso de mando, el diputado nacional Ricardo Alfonsín opinó que "no sería lo más conveniente" que Boudou asumiera la presidencia "debido a la situación en la que se encuentra, de los juicios y a las denuncias que pesan" sobre él.
"No creo que tenga los niveles de adhesión, aunque disminuidos, que tiene la Presidenta", enfatizó el radical, que aspira a renovar su banca el 27 de octubre, en diálogo con radio La Red. También deseó que "ojalá que se trate de una dolencia menor" lo que sufre Cristina.
"Creo que dejaría a todos tranquilos que haya una delegación parcial de aquellas tareas que, por lo que está pasando, no pueda concretamente hacer. Para no tener que entrar en una discusión de poderes generales sobre el vicepresidente", opinó José Ignacio de Mendiguren, candidato a diputado nacional por el Frente Renovador.
El expresidente de la Unión Industrial Argentina (UIA) señaló a La Red que "está faltando un poco de información" sobre la salud presidencial, lo cual le daría "más tranquilidad" a la población. También dijo que "hoy en lo único" que piensa "es en la recuperación de la mandataria" y que la noticia lo "impactó bastante en lo personal" porque siempre tuvo "una muy buena relación" con la mandataria.
Por último, el radical Ernesto Sanz defendió la asunción de Boudou: "Institucionalmente es el que tiene que estar", argumentó, aunque reconoció que el vicepresidente "se encuentra deslegitimado por las denuncias en su contra.
"Todo el ruido que ocurre en torno de un tiempo de inactividad de la jefa de Estado tiene que ver con que, en lugar de haber atenuado el presidencialismo, el país ha hecho todo en el sentido contrario. Entonces ahora parece que cruje todo el gobierno y que hay problemas de gestión", sostuvo el senador en declaraciones a la prensa de Rosario, por lo que pidió "quitarle dramaticidad y tremendismo a la cuestión".