Edgardo Kueider, el senador nacional detenido en Paraguay con más de 200 mil dólares sin declarar, volvió a presentar un recurso de amparo para que se revoque su expulsión de la Cámara alta. El legislador pasará Navidad en prisión domiciliaria mientras la Justicia investiga el origen del dinero con el que fue capturado en la frontera entre Ciudad del Este y Foz de Iguazú.
El legislador entrerriano fue expulsado por sus pares el último 13 de diciembre, durante una sesión especial donde hubo acusaciones de coimas. Uno de los discursos más fuertes fue el de José Mayans, de Unión por la Patria, quien aseguró que Kueider "sabe mucho" y pidió cuidarlo: "Que no salga ni al balcón, sabe mucho, no vaya a ser que se caiga del séptimo piso".
Este lunes, la jueza Sandra Arroyo Salgado rechazó eximirlo de prisión en la causa que lo investiga por enriquecimiento ilícito por supuesto pago de sobornos por parte de la empresa de seguridad privada Securitas para adjudicarse contratos con la empresa estatal de energía de su provincia, ENERSA.
Kueider y Ritondo, aliados de Milei en problemas
En medio de esa tormenta, Kueider pidió mediante una presentación: "Que vengo por la presente, en legal tiempo y forma, a interponer recurso de apelación en los términos del art. 15 y ccds. de la ley 16.986 y arts. 242 y sgtes. del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación -de aplicación supletoria-, contra la resolución de fecha 20/12/2024, notificada electrónicamente en igual fecha, a los efectos de que la Excma. Cámara revoque la resolución indicada".
El viernes, con otro escrito, había solicitado la anulación de la sesión en la que fue expulsado. Para ello utilizó el argumento del presidente Javier Milei: Victoria Villarruel, titular del Senado que encabezó aquella sesión, no estaba habilitada para hacerlo porque el jefe de Estado se encontraba de viaje en Italia, con lo cual debía ocupar provisoriamente el máximo cargo del Poder Ejecutivo.
En tal contexto, el diputado nacional de la Coalición Cívica, Maximiliano Ferraro, avaló a Villarruel en su postura favorable a la legitimidad de la sesión en la que el Senado decidió la expulsión del entrerriano. El tema, incluso, agrietó aún más la relación entre Villarruel y Milei. La vicepresidenta alegó que el Escribano General de la Nación, Martín Rodríguez Giesso, recién le notificó sobre la salida de Milei del territorio nacional el mismo día de la sesión, el 12 de diciembre, a las 19 hs, cuando la misma ya había concluido.
La Justicia se focaliza en el celular del socio de Kueider
A raíz de la confusión y los cuestionamientos a las decisiones emanadas por el pleno durante la sesión, Ferraro envió al día siguiente un pedido de acceso a la información pública. Villarruel le respondió al diputado de la Coalición Cívica en un escrito "de puño y letra", que el propio Ferraro divulgó este lunes en su cuenta de la red social X. "TERMINADO EL CULEBRÓN LIBERTARIO La vicepresidenta de la Nación fue notificada, conforme al artículo 88º de la Constitución Nacional y al artículo 8º, inciso c, de la ley 21.890, por el Escribano General de Gobierno el día 12/12 a las 19:00 horas. Acá está la prueba en respuesta al pedido de acceso a la información pública que realicé al día siguiente. Nótese la aclaración de puño y letra de la Señora Vicepresidenta @VickyVillarruel. Por si quedaba alguna duda…", escribió el legislador opositor.
El rechazo de Arroyo Salgado al pedido de Kueider
La jueza federal de San Isidro rechazó este lunes la eximición de prisión de Kueider en la causa que lo investiga por enriquecimiento ilícito por supuesto pago de coimas. La magistrada no aceptó el planteo de la defensa para que se le garantice la libertad si es extraditado a la Argentina desde Paraguay junto a su secretaria Iara Costa, informaron fuentes judiciales.
Arroyo Salgado envió un exhorto pidiendo la extradición para indagarlos en la causa que tramita en su juzgado. Además, rechazó los pedidos del nuevo abogado de Kueider, Juan Martín Cerolini.
En la resolución, la jueza argumentó que hay "peligro de entorpecimiento" de la investigación y, si Kueider o su secretaria recuperan la libertad, "podrían destruir, modificar, ocultar, suprimir o falsificar elementos de prueba de esta pesquisa".
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