Nació como una agrupación de “liberales del PRO”, en parte para diferenciarse de una corriente más progresista dentro del partido encarnada en Horacio Rodríguez Larreta, y se instaló como un sello que apoyó a Patricia Bullrich para las internas de Juntos por el Cambio. Nació en 2019 y en la pandemia decidió apoyar a la entonces presidenta del PRO.
Sin embargo, desde que ganó Javier Milei la presidencia, muchos de sus integrantes comenzaron a poblar lugares importantes del gobierno nacional mientras siguieron trabajando políticamente, especialmente en la Ciudad y en la Provincia. Hoy Apertura Republicana (AR) es una de las principales fuentes de reclutamiento de dirigentes que están pensando en pegar el salto del partido amarillo a las huestes bullrichistas-libertarias.
Además de la ministra de Seguridad, otro de los referentes, acaso el principal en territorio bonaerense, es Diego Valenzuela, el intendente de Tres de Febrero, quien viene pregonando un apoyo irrestricto a Javier Milei (su amigo desde los años que estudiaron juntos en la facultad).
AR está conformada por Juan Curuchet, director del Banco Central, y Carlos Pirovano, titular del Incaa, más Federico Pinedo (sherpa del G20), la diputada nacional por Córdoba Laura Rodríguez Machado (quien fue muy dura con el macrismo hace dos semanas en el Consejo Nacional del PRO); a los que se suman la legisladora porteña bullrichista Silvia Imas y el subsecretario de Desregulación, Héctor Huici (cercano a Pinedo), más varios funcionarios que trabajan también con Federico Sturzenegger, entre otros.
“Nos encantan las medidas de Milei. Aunque ya éramos liberales hace más de treinta años, incluso cuando era muy difícil serlo. Hicimos política desde distintos lugares, en 2019 nos reencontramos y, con la pandemia, naturalmente se dio en 2020 que nuestra referente sea Patricia (Bullrich)”, explica Imas a PERFIL, quien a los 16 años ya cobijó los conceptos liberales.
Hoy en la agrupación le sacaron “el PRO” pero sostienen las mismas ideas. Curuchet, de hecho, fue uno de los creadores de la ya famosa UPAU, el grupo universitario liberal de la Ucedé que irrumpió en los 80.
Pero, acaso, uno de los roles de AR es sumar dirigentes del PRO desencantados. Esto se vio nítidamente el martes 17 por la noche, en el cierre del año en Capitán Sarmiento, donde Valenzuela dejó claro el posicionamiento: “Hay que enchufar a la Provincia en el cambio nacional, porque además Kicillof está acorralado. Si nos unimos y trabajamos juntos en cada distrito sosteniendo el proyecto de Javier Milei y de Patricia Bullrich, nos va a ir muy bien en la Provincia”.
En su alocución, la ministra de Seguridad dijo que “hay que caminar la Provincia de punta a punta, no tenemos excusa, tenemos que ganar la Provincia”. La escuchaban Carlos Curestis, jefe del bloque de senadores bonaerenses de LLA, y el diputado provincial de LLA Guillermo Castello, entre otros dirigentes territoriales libertarios.
Al otro día, Karina Milei realizaba el cierre de año de LLA en el teatro Gran Rivadavia. Allí estuvo la senadora bonaerense Daniela Reich, esposa de Valenzuela.
La semana anterior, en la cena de despedida del año de AR en el Club Español, en Capital Federal, Bullrich planteó diferencias sustanciales entre Macri y Milei como jefes de Estado. Sin nombrar al expresidente, dijo que cuando proponía “ir para adelante” le decían que “no”. Uno de los invitados estelares ese día fue José Luis Espert.
Ya en mayo de este año AR fue noticia luego de que, en un acto en Luis Guillón, Esteban Echeverría, Bullrich invitó a Sebastián Pareja, el armador bonaerense de LLA y dirigente de Karina Milei. A raíz de esa foto, donde también estuvo Valenzuela, se tejió de manera progresiva el final de la relación Macri-Bullrich. Y también, apenas horas después, se consumó el desplazamiento de Reich de la presidencia del PRO bonaerense.
Además de Apertura Republicana, hay otros grupos bullrichistas trabajando en la fusión con LLA. Entre otros, un grupo con el intendente Ramón Lanús, de San Isidro, donde también se suman los dirigentes bullrichistas Pablo Walter y Juan Pablo Allan (el platense que maneja el registro nacional de armas). Lanús viene tejiendo un vínculo privilegiado con su par de San Miguel, Jaime Méndez, más su aceitada relación con Valenzuela.
