A las 18.30 horas, Alberto Fernández despegó desde Barbados rumbo a la Argentina, donde lo esperan los conflictos domésticos que deberá atender de inmediato. Y no será la primera vez que le sucede.
El miércoles el Presidente no tiene ninguna actividad programada, por lo que se espera que los principales funcionarios desfilen por su despacho en medio de la crisis con el kirchnerismo que llevó a Máximo Kirchner a renunciar a la presidencia del bloque.
El Presidente dejó Barbados este martes por la tarde después de sus visitas a Rusia y China haciendo un balance positivo de la gira. “Estoy muy contento con los distintos encuentros. Fueron muy necesarios y útiles para la Argentina”, dijo Fernández ante PERFIL y otros medios.
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Antes de regresar, Fernández mantuvo un encuentro con la primera ministra, Mia Mottley, y luego comenzó un encuentro con las naciones que integran la Organización de Estados del Caribe Oriental (OECO).
En argentina lo esperan los conflictos domésticos generados en las últimas semanas con la renuncia de Máximo Kirchner al frente del bloque del Frente de Todos. Desde Barbados, el Presidente adelantó que habló con Cristina Kirchner durante la gira y aseguró que ambos trabajan por la unidad. La Vicepresidenta se mantuvo en silencio hasta ahora y fue su hijo Máximo Kirchner quien escribió una carta en la que manifestó un fuerte desacuerdo en la negociación con el Fondo Monetario Internacional.
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Tras su llegada, Fernández hará un movimiento en su gabinete que involucra a la asesora presidencial, Cecilia Nicolini quien fue parte de la comitiva presidencial. En las próximas horas reemplazará a Rodrigo Rodríguez Tornquist, secretario de Cambio Climático. El trámite de designación de Nicolini avanza rápido en la secretaría Legal y Técnica, mientras otros funcionarios esperan el decreto para ser nombrados.
A su regreso, el mandatario también deberá ponerse al día sobre las conversaciones de Germán Martínez con los legisladores propios. El reemplazante de Máximo K terminó este martes con la ronda de charla con cada uno de los diputados para asegurar que el bloque seguirá unido. Ahora comienza “el poroteo” para saber la cantidad de votos con los que cuenta el oficialismo para avanzar con el proyecto sobre el acuerdo con el FMI. “No estoy poniendo en duda de que nuestra fuerza política nos va a acompañar mayoritariamente”, dijo ayer Fernández.