Independiente volvió a ser escenario de la eterna violencia del fútbol argentino. En la previa del clásico de Avellaneda, hubo un violento enfrentamiento entre facciones de barrabravas del Rojo, con una conocida parrilla de Wilde como escenario de la "batalla".
Según señalan, integrantes de una facción disidente de la barra, es decir quienes en la actualidad están fuera del manejo de los negocios, entraron a los tiros esta madrugada en la parrilla "El Tano", ubicada en plena avenida Mitre en Wilde. Allí estaban miembros de la "Barra oficial", festejando el cumpleaños de uno de sus integrantes, apodado "Ninja".
Lo cierto es que de las morcillas y festejos se pasó a los tiros, y si bien señalan que "no hubo heridos", algunas versiones que corrían este sábado ponían en duda esa afirmación. Oficialmente, no hubo heridos y tampoco detenidos, porque numerosos móviles policiales de la Bonaerense concurrieron raudamente al lugar, pero tanto los barras se habían retirado del "festejo".
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Según testimonios y videos de cámaras de seguridad, un grupo de al menos diez personas llegó al restaurante y comenzó a disparar sin mediar palabra, provocando el pánico entre los presentes. Los miembros de la barra oficial respondieron con tiros y persiguieron a los atacantes, aumentando aún más la violencia en la zona. A pesar de la intensidad del enfrentamiento, sorprendentemente no se reportaron heridos ni detenidos.
La policía llegó al lugar alertada por los llamados de vecinos y comensales poco después del tiroteo. Fuentes de seguridad informaron que no hubo heridos ni se registraron detenciones.
Horas después del suceso, el restaurante emitió un comunicado en el que se deslindó de lo sucedido: "Al parecer, hubo un enfrentamiento entre barras de un equipo de fútbol, que nada tiene que ver con la parrilla El Tano. Repudiamos todo tipo de violencia y dentro de nuestro establecimiento no aceptamos ningún modo de confrontación".
