La Legislatura de Misiones formalizó la expulsión de Germán Kiczka como diputado por la causa en la que está detenido y se lo investiga, junto con su hermano, por el delito de “tenencia, consumo y distribución de material de abuso sexual infantil”.
En una sesión ordinaria, los legisladores confirmaron que Kiczka deja su banca como diputado tras una extensa discusión, que generó polémica por la tardanza, aunque todavía resta un paso más para su definición.
Fue por medio de un proyecto de resolución impulsado por el diputado Carlos Rovira y otros legisladores que se llevó a cabo dicha sesión en la que se proponía “la expulsión de la Cámara de Representantes del diputado Germán Kiczka en virtud de los hechos aberrantes que involucran su accionar delictivo”.
Desde el recinto, Anazul Centeno sostuvo: “La responsabilidad que nos cabe como Poder Legislativo, siendo nosotros soporte de la Justicia, respetando los tiempos procesales y de investigación y, sobre todo, respetando la independencia de los poderes, para que no haya ni un ápice de dudas ni especulaciones al respecto de este caso, que es gravísimo”.
“Hemos accionado como las normas lo determinan procediendo al desafuero, inmediatamente después de recibir el pedido judicial, y creando una comisión investigadora en ese mismo acto; y mientras eso sucedía y nadie más decía nada, Kiczka ya estaba prófugo, en rebeldía y desoyendo a la Justicia”, explicó la diputada.
A su vez, Centeno anunció que la formalización ya fue ingresada a la comisión investigadora, “cuyos miembros ya han sido debidamente notificados para que dicha comisión se expida de manera inmediata”.
Por último, la diputada expresó con enojo: “En nuestra Legislatura, en nuestra provincia, no hay lugar para estos delincuentes, el lugar es la cárcel”.
Chat comprometedor. En las últimas horas se conoció que, gracias al peritaje de su teléfono, Germán Kiczka habría tenido un conflicto con una mujer por un episodio “no consentido” en una pileta.
El material ya está en manos de la Justicia, que en lo sucesivo deberá determinar si este mensaje tiene vinculación con la causa de pedofilia que involucra a los hermanos Kiczka.
“Te voy a ser sincera, Germán, lo que pasó en la pileta de (…) no fue consentido, así que no te vuelvas a acercar a mí”, le manifestó la mujer a través de un mensaje de WhatsApp del 15 de agosto de 2020.
