La expareja de Luciana Muñoz, la chica de 20 años que permanece desaparecida desde el 13 de julio en la ciudad de Neuquén, fue detenido y se determinó que permanezca durante cuatro meses con prisión domiciliaria. En ese sentido, la Justicia acusó al joven de falso testimonio, además de estar sospechado por el hecho.
El hombre fue identificado como Maximiliano Avilés. El arresto fue a raíz de que presuntamente mintió en dos declaraciones oficiales, una ante la policía y otra ante la fiscalía, durante las investigaciones desarrolladas para encontrar a Luciana, según indicó Diario Río Negro.
Desaparición de Luciana Muñoz en Neuquén: un testimonio clave y la hipótesis de la trata de personas
En primer lugar, el imputado aseguró que su relación con la joven terminó entre marzo y abril, y que la vio por última vez un mes y medio antes de su desaparición. Sin embargo, testigos afirmaron que estuvo con ella entre el 8 y el 10 de julio.
El segundo testimonio que lo compromete es el que sostiene que no había salido de su domicilio entre el 12 y 16 de julio pasados. Pero esa circunstancia fue desmentida por la geolocalización de su celular, que señala un recorrido de 7,5 kilómetros el 13 de julio en 11 minutos.
De esa manera, la fiscalía y la querella pidieron prisión preventiva. No obstante, el juez de Garantías del caso otorgó la domiciliaria, solicitada por la defensa.
La desaparición de Luciana Muñoz: la principal hipótesis es la trata de personas
Luciana Muñoz fue vista por última vez el 13 de julio en el barrio en la Manzana 2, Casa 17 de la ciudad de Neuquén. Días después del hecho, el 24 de julio pasado, el gobierno neuquino hizo el anuncio de que ofrece una recompensa por el monto de hasta un millón de pesos, en tanto indicó que la joven mide 1,50 metros, es de tez trigueña, rubia, delgada y de ojos marrones.
De acuerdo con el sitio LMNeuquen, en la madrugada que salió de su casa concurrió a juntarse con un joven con el que estuvo consumiendo alcohol y cocaína. La chica, al momento de desaparecer, no tenía celular porque se le había roto semanas antes. Su familia denunció su desaparición con 72 horas después, ya que la madre le daba un margen de 48 horas habitualmente a sus ausencias del hogar.
La última vez que fue vista llevaba una chomba negra, jean nevados y zapatillas negras. Según fuentes policiales y judiciales, la mujer se encontraba en situación de riesgo por su adicción a las drogas.
La principal hipótesis que la Justicia maneja es que fue captada por una red de trata. Dentro de las más de 200 declaraciones, los investigadores le dieron más relevancia al de un taxista que dijo haberla llevado desde la casa de un chico llamado Isaías, en el barrio Toma Norte, hacia Los Hornitos para “comprar droga”.
De esa manera, se realizó un allanamiento en el domicilio del hombre donde dijo que durmió con Muñoz en la noche del 13 de julio y consumieron drogas y alcohol, hasta que a las 7 de la mañana que se fue “a trabajar”. Además, se dispuso una mesa interinstitucional con equipos de apoyo para la familia.
Sin embargo, a más de 40 días de la desaparición, el ministro de Seguridad de Neuquén, Matías Nicolini, informó que “no hay novedades” en la causa, a la par que sostuvo que por el momento “no van a subir la recompensa”.
Al respecto, el funcionario remarcó que la investigación y los rastrillajes continúan, pese a que muchos supusieron que los mismos se habían suspendido. “No se ha disminuido la intensidad de la búsqueda”, subrayó. En esa línea, explicó en Todo se Sabe por Radio 7 que los procedimientos se llevan a cabo por pedido de los investigadores, ya que “no es una decisión que se toma desde el Ministerio”.
Respecto a la recompensa, el jefe de la cartera indicó que se asignó un monto y luego se solicitó ampliarlo, pero por el momento “no se pidieron mayores medidas en ese sentido”. “Desde ya, lógicamente, todos estamos dispuestos a brindar y a poner desde nosotros todo lo que sea necesario para encontrar a la joven”, finalizó.
