La escena parece digna de una película de terror, pero es real. Una familia fue asaltada en un country de Cañuelas por una banda armada que entró a su casa de madrugada y con armas con mira láser y chalecos antibalas.
El caso ocurrió el viernes pasado en el barrio "Lomas de Petión", ubicado sobre la avenida Mariano Acosta, a pocos metros de un destacamento policial. Al menos cuatro delincuentes ingresaron a un domicilio de dos plantas después de reducir a un guardia de seguridad.
Las víctimas, un matrimonio y su hijo de dos años, estaban durmiendo, pero se despertaron a la 1.30 AM con los ladridos de los perros, según publica el sitio InfoCañuelas. Cuando una de ellas bajó por la escalera para averiguar lo qué estaba pasando se topó con los ladrones, que vestían ropas oscuras, llevaban capuchas y chalecos antibalas.
Los autores inmovilizaron a todos con precintos de plástico y revolvieron la casa en busca de dinero y objetos de valor. De acuerdo a las fuentes, se llevaron 690 dólares, algo de ropa y artículos de electrónica, entre otras cosas.
Rehenes y asaltos tipo comando: por qué los countries dejaron de ser un lugar seguro
Una hora y media después la pareja logró desatarse y dar aviso a la seguridad del barrio. Por el modus operandi, los investigadores no descartan que se trate de una misma banda que actuó en otros casos recientes, ocurridos en Chacras de la Trinidad y La Llovizna.
Números que alarman
Según datos del Comité Argentino de la Asociación Latinoamericana de Seguridad (ALAS), a los que tuvo acceso PERFIL, la curva de robos en countries, barrios cerrados y clubes de campo aumentó exponencialmente en el primer trimestre de 2021 y en el 91 % de los casos fueron violentos con rehenes y amenazas con armas de fuego, como sucedió en el caso de Cañuelas.
En los tres primeros meses del año hubo al menos 33 intentos de robo, 30 de ellos con delincuentes armados. En el 88% de los casos los delincuentes accedieron al predio por el perímetro, mientras que un 9% lo hicieron por el control de ingreso principal. Lo llamativo es que, de los 33 hechos registrados hasta el 30 de marzo pasado, en solo uno la seguridad logró frustrar el plan delictivo.
De acuerdo a los datos que maneja ALAS, presidida por Diego Madeo, el año pasado registraron 23 episodios, aunque en un contexto atípico por el aislamiento, social y preventivo que decretó el Gobierno el mes de marzo.
En 2018, la Asociación recopiló un total de 81 intentos de robo, con una muy baja presencia de delincuentes armados, una realidad que cambió peligrosamente en los últimos meses.
LN