¿El dólar es caro a 45 pesos? ¿Y a 50 o a 60? Los bonos rinden 14% en dólares, el riesgo país es alto y la falta de actividad conspira para cumplir con el déficit cero. El Gobierno sabe que el dólar definirá el futuro de corto plazo. Es la primera vez en muchos años que no habrá crecimiento en un año impar, apalancado por la política fiscal y monetaria.
Los exportadores, con una buena cosecha, sólo liquidarán el dólar a un precio futuro esperado.¿Cuál es ese precio? No sabemos si va a transitar por el piso o el techo de la banda, pero podemos establecer una estrategia deseada. El mercado estima un dólar futuro superior a 60 pesos a fines de diciembre y la banda hoy tiene un techo de 50 pesos. Lo seguro es que, de haber un ajuste, lo mejor para la estrategia electoral es que sea lo antes posible.
Existen más de 1.000 millones de dólares en depósitos a plazo fijo y se estima que se van a dolarizar en el transcurso del año. Una vez en la banda superior, el Banco Central puede intervenir con 150 millones de dólares diarios, más los 60 millones del crédito del FMI, más las liquidaciones de las exportaciones. La crisis de corto plazo se podría superar con un dólar en la banda superior.
Estrategia de supervivencia electoral: dólar, tipo de cambio y FMI
La credibilidad es el problema, y la solución es sostener un discurso de políticas públicas firmes. El camino hacia los 50 pesos debería transitarse en el corto plazo y de forma moderada y sostenida. Llegar a un dólar de 50 pesos a fines de abril sería un buen resultado.
Ese ajuste impactaría sobre la inflación de mayo y junio, pero podría converger a una tasa del 1,5% para las elecciones. Es la última oportunidad para un gobierno con cada vez más fe depositada en el rescate de Vaca Muerta y la producción agropecuaria del año, los únicos sectores con dinámicas de crecimiento en el 2019.
El peor escenario es que el mercado convalide una inflación esperada superior al 3% mensual y que las expectativas de tasa de interés necesaria para evitar una corrida cambiaria destruyan la confianza de corto plazo y, por lo tanto, la corrida de cobertura se acelere en los próximos meses. Si es así, el gobierno necesitará mucho más de las reservas para evitar un futuro incierto.
Las 3 claves imprescindibles para entender por qué sube el dólar
El problema no es el valor del dólar sino la credibilidad. Si la confianza se pierde,el ancla con la realidad del gobierno se evapora.No es posible gobernar sólo con fe.Es necesario establecer horizontes de gestión con objetivos claros y herramientas creíbles. Además, deben incluir a la mayoría de los habitantes de la Argentina, para representar un futuro sostenible.Sin inclusión,ningún proyecto es viable.
Ojalá se comprenda que con un discurso anclado en el pasado (respecto de las responsabilidades del presente) no se puede construir futuro. El valor del dólar, en este contexto, es el indicador que refiere a la confianza, la estabilidad y la inversión de largo plazo. Hoy, es urgente estabilizarlo en un esquema de flotación con una previsibilidad cierta.
* Director del Centro de Estudios Económicos e Históricos sobre Desarrollo (CEEHD) de la UB.